Una final cada tres días: eso es el Barça

Xavi Hernández, sonriendo en rueda de prensa

Xavi Hernández, sonriendo en rueda de prensa / David Ramírez

Lluís Mascaró

Lluís Mascaró

El Barça pasa un examen cada tres días. Cada partido es una final. Lo ganado ayer no sirve hoy. Y menos mañana. Es la exigencia máxima. Solo vale la victoria. Por eso es el club más grande del mundo. Hay que tener mucha personalidad para sentarse en el banquillo del Camp Nou y asumir este nivel de presión. Xavi, mejor que nadie, sabe lo que es y lo que significa el Barça. Lo vivió durante 17 temporadas como jugador y capitán. Y es consciente de la tensión que rodea a la entidad blaugrana. Por eso demostró una enorme valentía al aceptar el cargo de entrenador en un momento tan complejo. Ahora las cosas van relativamente bien (se ha ganado un título, la Supercopa de España, se va líder en la Liga y se está en semifinales de la Copa) pero esta sensación de tranquilidad puede desmoronarse en cualquier momento.

Al primer tropiezo, volverán las críticas: “Si no ganamos al Girona será una hecatombe tremenda”, bromeó el técnico en la rueda de prensa previa al derbi catalán, reconociendo la escasa estabilidad del entorno después de tantas decepciones y fracasos. El barcelonismo es especialista en pasar de la euforia a la decepción (y viceversa) en una misma semana. Y Xavi tiene experiencia para controlar esta montaña rusa de emociones: “Como entrenador debo mantener la calma e intentar transmitirla a los jugadores”. Una misión casi tan compleja como construir un equipo campeón. 

Este nuevo Barça va por muy buen camino. Más allá de la dolorosa eliminación en la fase de grupos de la Champions (insisto, por segunda temporada consecutiva), está demostrando una enorme solvencia en el resto de competiciones. Especialmente en la Liga, donde ha ganado 14 de 17 encuentros, con solo una derrota (en el clásico del Bernabéu) y dos empates (Rayo y Espanyol). Xavi está satisfecho con el rendimiento del equipo. Y solo tiene una preocupación: “Deberíamos sentenciar antes los partidos... pero los estamos ganando que es lo importante”.

Esta tarde, el Girona de Míchel pondrá a prueba el buen momento de forma de los blaugranas, que tendrán, una jornada más, la obligación de sumar los tres puntos. “Ellos no tienen nada a perder y nosotros tenemos toda la presión del mundo”, reconoció Xavi. Lo dicho: un nuevo examen en cada partido... Y más esta semana: si el Barça gana hoy se pondrá +6 sobre un Madrid que mañana recibe en el Bernabéu a la Real Sociedad (segundo contra tercero). Un pinchazo de los blancos permitiría un despegue ¿definitivo? de los blaugranas.