Esto no se puede aguantar

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Valverde no encuentra la tecla / Valentí Enrich

Joan Mª Batlle

Joan Mª Batlle

Ahí tenemos al Barça, con más puntos perdidos (8) que ganados (7) en lo que es el peor inicio de Liga de los últimos veinticinco años. Situación grave y muy preocupante porque la dinámica en la que se ha entrado indica que el entrenador no ha detectado el problema y, en consecuencia, cuando no hay diagnóstico es imposible aplicar la solución adecuada.

La cuestión es que hay demasiados síntomas de bloqueo mental, físico y táctico en un equipo que no puede tener como único argumento la presencia, condición e inspiración de Leo Messi, por mucho que sea el mejor jugador del mundo. No, un equipo que soporta un coste salarial de 671 millones de euros no puede venirse abajo porque algunas de sus figuras no estén al cien por cien. No, por lo menos ante un recién ascendido como el Granada, que se apaña con 35 millones. No, eso no se puede aguantar, como no se pueden aguantar otras cuestiones que delatan una mala planificación deportiva, una mala gestión del entrenador y una escasa motivación e implicación de demasiados jugadores. 

No se puede aguantar que solo se haya ganado un punto de seis ante dos recién ascendidos como Osasuna y Granada. No se puede aguantar no chutar a puerta hasta el minuto 80 cuando vas perdiendo desde el primer minutos de juego. No se puede aguantar que después de gastar 255 millones en fichajes, un niño de dieciséis años sea el mejor, el más decisivo en el arranque de temporada y el que pinte la cara a algunos que han costado 120 millones, y no quiero mirar a nadie...

No se puede aguantar que después de varios años buscando un suplente para Alba, se gasten 20 millones en un futbolista que no da la talla hasta el punto de que el entrenador le cambie en el descanso a riesgo de señalarle y acaso “matarle” para el futuro. No se puede aguantar que en cuatro partidos en campo contrario, contando aquí la Champions, solo se hayan marcado dos goles y en tres el equipo se haya quedado a cero. No se puede aguantar que el equipo solo haya rematado ocho veces a portería en estos miserables cuatro partidos. No se puede aguantar que el entrenador aún no haya encontrado el sitio a De Jong ni que a Griezmann solo se le haya visto un ratito contra el Betis. No se puede aguantar... 

No, no se puede aguantar ni un minuto más esa imagen de impotencia, caos y desorganización que el Barça está transmitiendo ahora mismo. ¿Culpables? Sin duda, los hay en todos los estamentos. Valverde no se ha hecho con las riendas del vestuario y da la impresión de naufragar en el dibujo táctico, en el regreso a un 4-3-3 que se le atasca seguramente porque es el primero que no cree en él. ¿Los jugadores? Miren, la pasada temporada, cuando se lesionó Messi, todos dieron un paso adelante, pero esta vez todos miran para otro lado, eso lo dice casi todo. ¿La secretaria técnica? Bueno, está claro que son muchos años en que los fichajes no marcan diferencias. ¿La directiva? Cuando ha cambiado tantas veces en tan poco tiempo de director deportivo, mánager general y cargos técnicos varios, poco se la puede defender. Así que pónganse todos a trabajar que eso la afición no lo aguantará mucho más.