Esto es el aperitivo del Mundial,lo bueno está por llegar

España está trabajando con mucho calor en Krasnodar

España está trabajando con mucho calor en Krasnodar / EFE

J.Mª Casanovas

J.Mª Casanovas

El Mundial lo acapara todo. Los clubs parece que estén de vacaciones. Los fichajes están congelados a la espera de ver lo que pasa en Rusia. En España se habla más que nunca del campeonato por una razón sencilla: Mediaset ofrece en abierto y gratis todos los partidos ya sea por Tele 5 o Cuatro. El éxito de audiencia sorprende a la propia empresa y los encuentros de La Roja superan de largo el listón de los diez millones de espectadores. En la primera fase la noticia es que los favoritos sufren más de la cuenta, les cuesta ganar y de momento solo Bélgica parece abonada a las goleadas. La razón la encontramos en que las selecciones modestas progresan, mejoran técnicamente y físicamente van como toros. El fútbol recupera su condición de deporte rey indiscutible. La primera fase clasificatoria solo es el aperitivo con demasiados partidos intrascendentes; a partir de octavos de final con las eliminatorias por KO vendrá lo bueno.

Cuando llevamos diez días de campeonato, podemos hacer un primer repaso de su sucedido y merece buena nota. Nos habían asustando tanto sobre lo que podía suceder en Rusia, que la verdad es que estamos gratamente sorprendidos de cómo funciona el campeonato. Los campos están llenos y el ambiente en las ciudades sede es festivo. El comportamiento de las aficiones en las gradas es modélico. Los árbitros reciben la ayuda del VAR con más elogios que críticas. La organización de la FIFA controla la situación y en las calles apenas hay incidentes. Los temidos ‘hooligans’ rusos que parecen más bien bandas paramilitares están de momento desaparecidos. El Gobierno de Putin sabe lo que se juega en el evento y los tienen confiscados lejos de los estadios. Ni tan siquiera las voces disidentes y discrepantes contra Putin han utilizado el altavoz del Mundial. Por si fuera poco, la selección anfitriona, Rusia, está consiguiendo excelentes resultados y su papel en la primera fase es brillante ya que apunta a campeona de grupo si gana a Uruguay.

En cuanto al fútbol visto hasta la fecha, es otra historia. La campeona Alemania no podía comenzar peor. El equipo de Brasil es un laboratorio de resultados imprevisibles. La Argentina de Messi las pasa canutas y se lo juega todo frente a Nigeria, que les dio vidilla cuando parecían enterrados. España ha superado el trance del cese de Lopetegui con normalidad aparente aunque tiene que rematar la faena ganando a Marruecos. Atención a Bélgica que está haciendo bien las cosas y tiene un seleccionador muy serio, el catalán Roberto Martínez que se ha buscado un ayudante de lujo, Thierry Henri. La campeona de Europa, Portugal, lo fía todo en Cristiano Ronaldo, lo que es una apuesta de riesgo. Croacia apunta buenas maneras ya que su fuerza esta en el bloque. Francia estará en los octavos de final aunque su juego tiene que mejorar. México suma ya dos victorias de mérito en especial la que infringió a Alemania.

Si analizamos las individualidades, hay más sombras que luces. Comencemos con los elogios, Cristiano ha comenzado el campeonato como un avión, a tope, cuatro goles en dos partidos, claro aspirante al Pichichi. El belga Lukaku no le va a la zaga, dos dobletes consecutivos y cuatro dianas para el nueve de Bélgica que tiene la suerte de jugar al lado de De Bruyne y Hazard. Griezmann ha dado una de cal y otra de arena. Diego Costa se ha ganado la titularidad con La Roja a base de goles decisivos. Neymar es más noticia por lo que dice y hace que por lo que juega. Un caso aparte es Messi. Parece desenchufado, juega pero no luce. Quiere pero no puede. Roto por dentro y por fuera. Menos mal que Nigeria les echó una mano y el argentino afila el colmillo para sacar a su selección del pozo.