Este no es el camino

Este mundo en el que vivimos en el que toda va tan de prisa, en el que nos negamos a justificar la espera para obtener algo, que lo queremos todo al instante y sin dificultades, se agudiza aún más cuando de asuntos de fútbol se trata. Hace años, esperábamos a hablar de futuros técnicos o futuros fichajes para un equipo  cuando la crisis era flagrante y se atisbaba una inminente destitución del técnico, o cuando acababa la temporada, que entonces se hablaba, y mucho,  de posibles incorporaciones al primer equipo.

Sin embargo ahora, a estas alturas, ya llevamos tiempo hablando de posibles entrenadores que van a sustituir a Valverde, de algunos jugadores que ya están en la órbita de la secretaría técnica en sustitución de otros. Nombres que parece que ya estén atados hoy, para a los dos días ver que ya no.

Hay quienes no tienen paciencia. Necesitan a mitad de temporada, cuando el equipo va líder en La Liga y de su grupo de Champions, pensar en otras personas, exigiendo, que las que no quieren que estén lo den todo ganar los trofeos en liza. Me pregunto: ¿Cómo se puede trabajar bien sabiendo que algunos quieren que te marches? Ya sé que esto va con el oficio y que los entrenadores y jugadores les exigimos cosas que a un amigo seríamos incapaces de pedirles.

Ya sé que cobran todos mucho y que para algunos esto ya es razón para pedirles el cien por cien. Los jugadores saben la parte de culpa que tienen, suelen ser egoístas y orgullosos. Salvo Leo, todos se saben útiles pero no indispensables. A final de temporada, se lo recordaremos a quienes no nos hayan dado nada; pero hasta entonces, sugiero esperar. Que trabajen y mejoren. Ellos saben que no están haciendo las cosas como los aficionados quisiéramos. A veces se entra en dinámicas difíciles de explicar e imposibles  de resolver con un par de charlas de vestuario. 

Si esta temporada queremos ganar algún título más que la temporada pasada, el equipo tendrá que mejorar muchísimo, pero también tendrá que sentir que les apoyamos entre todos, siempre desde la crítica constructiva y no querer ganar ya, destituir ya, fichar ya, porque este, sinceramente, no creo que sea el camino.