Equivocarse, reconocerlo, crecer

Koeman ya trabaja en la próxima temporada

Koeman ya trabaja en la próxima temporada / FCB

Bojan Krkic

Bojan Krkic

Después del fútbol, el debate es el deporte favorito del barcelonismo. Se discute sobre todo y sobre todos y está bien que así sea porque el intercambio de opiniones enriquece. Esta forma de vivir el club solo tiene un pero: la polarización excesiva. No ocurre siempre, pero tengo la percepción de haber entrado en esa fase con Ronald Koeman. O estás a favor o estás en contra y el término medio desaparece cada día un poco más que el anterior. Y no se trata de apoyarle o criticarle, sino de reconocer qué ha hecho bien, qué no ha hecho bien y, a partir de ahí, valorar qué pesa más para cada uno. Reconozco que, tal y como acabó el equipo el pasado verano, esta temporada ha sido positiva. No es lo mismo terminar sin títulos y sufriendo por la clasificación para la Champions (que se lo pregunten a Liverpool o Juventus) que hacerlo ganando la Copa, y optando a LaLiga hasta dos jornadas antes del final. No tuvo los refuerzos que pidió, pero futbolistas como De Jong han mostrado su mejor versión en el Camp Nou y Busquets la ha recuperado. La irrupción de Pedri también es suya. Como lo es gestionar la recuperación para la causa de Leo Messi.

¡Claro que Koeman ha hecho cosas bien! Dadas las circunstancias, creo que no puede discutirse que la temporada no es mala. Sin embargo, a Ronald le ha faltado algo imprescindible para seguir avanzando: la autocrítica. Errar es humano y errar mil veces, también. El problema llega cuando no eres capaz de reconocer tus fallos porque seguirás cometiéndolos. Nunca he escuchado a Koeman asumir equivocaciones sobre sus planteamientos o su gestión durante los partidos. Sí le he visto quejarse de los árbitros y del VAR, como también le oí decir que la plantilla no tiene nivel un día después de haber pedido respeto para sus jugadores. Esta actitud no es un problema en sí mismo, sino en sus consecuencias.

Para crecer es imprescindible identificar aquello que no hemos hecho bien con el objetivo de cambiarlo. Si la sensación es que todo está correcto, se hace muy difícil avanzar. Entiendo que la continuidad de Ronald solo es factible si existen garantías de que la radiografía realizada por el propio técnico a la temporada que ha acabado es la correcta. Y por todo lo que hemos escuchado en sus ruedas de prensa, los errores siempre los han cometido los otros, nunca él. Me parece este un punto importante a la hora de tomar una decisión sobre su futuro porque el Barça solo progresará si lo hace desde la autocrítica.