Un equipo con mucho físico pero poco gol

UN GETAFE CON OBJETIVOS DIFERENTES Sin duda alguna, el Getafe, habituado en las últimas campañas a entrar en Europa o en luchar por estar muy cerca, se ha visto esta temporada luchando por eludir el descenso y, tal vez, sin tener la mentalización adecuada, como sí la tienen equipos que desde el primer momento saben que les va a tocar sufrir. José Bordalás consiguió éxitos increíbles para este modesto club, pero mantener la motivación con el paso de las campañas es mucho más difícil y, acaso, sea eso lo que le está pasando factura. 

El juego del conjunto azulón se basaba principalmente en el aspecto físico: se dedicaba a presionar en la parcela central con una gran intensidad para recuperar el balón y coger desprevenido al rival en defensa. Esa era una de sus principales virtudes que seguramente ahora haya descendido ostensiblemente. Respecto a la pasada temporada, el gran cambio viene dado por su poca capacidad goleadora. Es, con 22 goles, el peor conjunto en esta faceta, empatado con el Eibar de Mendilibar, y habiendo conseguido prácticamente la mitad de goles que conseguía en pasadas campañas. En cambio, sigue manteniendo su buen nivel defensivo aunque encaje algún gol más que la pasada temporada, en la que terminó siendo el tercer mejor equipo en este mencionado aspecto defensivo. 

ALTERNA DIBUJOS TÁCTICOS El 4-4-2 muy simétrico de las pasadas temporadas ha dado paso en la presente, en muchos encuentros, al 4-2-3-1. Ante el Real Madrid, en la última jornada, siguió apostando por los dos puntas, pero es muy probable que ante el FC Barcelona renuncie a uno de sus atacantes para reforzar el centro del campo. 

David Soria es el fijo en la portería, después de una fase con dudas que le llevó al banquillo. En defensa juega con línea de cuatro, que sin Nyom, sancionado, podría ocupar Damián Suárez o incluso Iglesias si el técnico quisiese doblar el lateral como hacía habitualmente la pasada temporada.

En la izquierda, Olivera y Cucurella por delante como doble lateral pero con una gran participación y profundidad en esa banda que es la preferida para atacar a los rivales. Las dudas aparecen en el eje de la zaga: lesionado Cabaco, Sofian Chakla era la apuesta, pero ante los de Zinedine Zidane fue Timor —un medio centro— el que ocupó esa posición y dejando en el banquillo a tres centrales como son Sofian Chakla, Chema y Etxeita, señal de no confiar en exceso en ellos. Podría entrar Sofian Chakla por Djené, y reforzar el centro del campo con Timor, que acompañaría a dos fijos como son Arambarri y Maksimovic.

Aleñá en la media punta y una referencia arriba, bien Jaime Mata —el autor del gol del Getafe en el partido de la primera vuelta, de penalti—, bien Enes Ünal, que fue suplente en aquel encuentro, entrando en la segunda mitad por el hoy lesionado Cucho Hernández. El entrenador del Getafe, de todas formas, tiene un gran problema, como ya hemos dicho, en el gol. Jaime Mata y Ángel —el delantero que la pasada temporada estuvo muy cerca de ser el elegido para reforzar la vanguardia del FC Barcelona— son sus máximos goleadores con 5 goles cada uno, que no son ni la mitad de los que consiguieron en el curso anterior