La enorme diferencia entre Barça y Real Madrid

Piqué ante Bale en el clásico del Camp Nou

Piqué ante Bale en el clásico del Camp Nou / AFP

J.Mª Casanovas

J.Mª Casanovas

El Real Madrid es una monarquía dictatorial presidida por el rey Florentino con poder y mando. El Barça es una democracia deportiva dirigida por el Príncipe Bartomeu bajo el control de los socios compromisarios. Los dos grandes del fútbol español se parecen como un huevo a una castaña. O sea, nada en las formas y poco en el fondo. Cada uno va por su camino, con una filosofía de club diferente y con dos presidentes con personalidades opuestas. Florentino Pérez actúa como un ser superior. Bartomeu quiere que la institución blaugrana funcione como una empresa multinacional. Barça y Real representan también a dos ciudades con un talante muy diferenciado. Madrid es poder, opulencia y figuración. Barcelona es cosmopolita, comercial y adelantada. A partir de aquí, la rivalidad deportiva es un aliciente morboso con el marcador como decorado de fondo.

A día de hoy hay una enorme diferencia entre un Barça que marcha líder y un Madrid que ha caído al noveno puesto de la clasificación tras el peor arranque de competición que se recuerda. Parece que se repite la historia de la última Liga cuando los blancos acabaron a 18 puntos del campeón. El Barça vive una estabilidad notable a pesar de la lesión de Messi, el Madrid atraviesa una crisis que refleja los errores cometidos en el pasado. Cuando un equipo deja que se marche el entrenador que propició tres Champions y pierde a su estrella y máximo goleador, la debacle es inevitable y se paga. El adiós de Zidane y el portazo de Cristiano son dos puñales que el Madrid lleva clavados, una herida que desangra al equipo. Lopetegui fue un mal invento y se ha convertido en el enésimo entrenador de usar y tirar. Imaginen por un instante donde estaría el Barça si un mes antes de comenzar la temporada Valverde y Messi se hubiesen marchado. Aquí ardería el Camp Nou, allí intentan pasar página sin autocrítica y sin que el presidente de la cara.

Llegados a este punto es de justicia valorar el trabajo de Valverde. Da equilibrio y consistencia a la estructura deportiva a pesar de no tener empatía y no vender camisetas. No le pagan para que sea simpático ni monte shows, solo le exigen que saque el máximo rendimiento de una plantilla que ha sabido crecer cuando hacía mas falta, tras la lesión de Messi. Mientras tanto el Madrid tiene un entrenador provisional cuyo único aval es ser protegido de Florentino, nadie sabe lo que puede durar Solari, está colgado del marcador.

El Madrid se ha convertido en un equipo sin rumbo ni líder. Benzema y Bale no dan mas de si. La sombra de Cristiano les eclipsaba, sin el portugués han puesto en evidencia sus limitaciones. A Modric, Sergio Ramos y Kroos comienzan a pesarles los años. Marco Asensio no acaba de dar el gran salto, Isco es mas brillante que efectivo y Varane atraviesa una baja forma alarmante. En el Barça sucede todo lo contrario. Luis Suarez ha dado un paso de gigante con la ausencia de Messi, Lenglet se ha confirmado como un central de garantía y el brasileño Arthur ha sido la pieza clave para dar estabilidad y solidez al centro del campo.

La falta de Cristiano ha debilitado de forma irreversible al Madrid. La continuidad de Messi en el Barça da solidez a un proyecto que lleva diez años funcionando. La diferencia es enorme.

¡ESTALLA EL UEFAGATE!

Atención a una denuncia que puede causar un auténtico terremoto. “Football Leaks”, un medio que hasta ahora siempre ha desvelado escándalos veraces en el mundo del fútbol aportando documentos que certifican la credibilidad de sus informaciones, desvela que Infantino y Platini, cuando mandaban en la UEFA como secretario general y presidente, permitieron al Paris SG y al Manchester City romper el “Fair Play” financiero. Validaron un contrato de financiación irregular entre el club francés y el Gobierno de Qatar por el que el PSG recibió 1.800 millones de forma fraudulenta.

Hace mucho tiempo que se sospecha que el club de Paris tiene una doble contabilidad sostenida por el Gobierno de Qatar. Tampoco han estado nunca claros los números del City propiedad del Gobierno de Abu Dhabi. Si se confirma la denuncia de “Football Leaks”, el equipo galo podría ser expulsado de la Champions y la continuidad de Neymar y Mbappe estaría seriamente comprometida. En este escándalo sin precedentes, Platini jugó un papel de protagonista por su íntima relación con Nasser Al-Khelaifi mientras que Infantino se reunió de forma secreta con los máximos representantes del PSG y City para ocultar la financiación irregular. Es un escándalo de grandes dimensiones que puede afectar a la presidencia de Infantino en la FIFA si se confirma lo que publica el semanario alemán “Der Spiegel”. Hay documentos que revelan infracciones, engaños y estafas en las cuentas financieras. Después del FIFAGATE que costó el puesto a Blatter, el UEFAGATE amenaza a Infantino y a dos clubs del renombre del PSG y Manchester City. Y mucha atención al próximo Mundial que se celebra en Qatar, el financiador irregular del PSG