Se encienden todas las alarmas en el Barça

El Granada sorprende al Barça en la primera jugada (ES)

El Granada sorprende al Barça en la primera jugada

Ernest Folch

Ernest Folch

El Barça se despeñó en Granada en uno de los peores partidos de los últimos tiempos, que ya es decir. Aunque parezca mentira, los de Valverde consiguieron superar en la primera parte las desastrosas actuaciones en San Mamés y Pamplona, y lograron bajar a un nivel de mediocridad difícil de recordar.

El equipo empezó una vez más desconcertado y sin ningún tono competitivo, y en el minuto 2, tras un fallo infantil del debutante Junior, ya iba por detrás en el marcador y totalmente a remolque. Es cierto que en la segunda parte se produjo una mejora sustancial con la entrada de Messi y Ansu Fati, que fueron los dos mejores atacantes con mucha diferencia: Messi, físicamente todavía en pretemporada, logró al menos colarse entre líneas, y Ansu estuvo rápido, atrevido y valiente, y por sus botas pasaron todas las ocasiones del partido.

De Suárez y Griezmann no hubo ninguna noticia, y no se sabe ni siquiera si pasaron por el partido. Suárez chutó una sola vez a puerta y Griezmann estuvo desaparecido cuando más se le necesitaba, y ya van unos cuantos partidos.

Que en estos momentos un niño de dieciséis años le pase la mano por la cara a cracks consagrados mundialmente debería provocar una seria y muy dura reflexión interna. Lo que es indudable es que la derrota de este sábado reproduce un patrón muy preoucupante en este inicio de curso: el Barça se colapsa fuera de casa, empieza mal los partidos, su defensa (con la excepción de Piqué) hace aguas, la circulación de balón es lentísima y hay una cantidad alarmante de jugadores muy por debajo de su nivel: Suárez, Griezmann, Sergi Roberto, Semedo o Rakitic son en estos momentos caricaturas de ellos mismos.

Y en esta papilla de responsabilidades, aparece Valverde de fondo, en un inquietante segundo plano, con el mismo problema de escaso liderazgo que ha mostrado en los momentos críticos. Atención porque suenan ya todas las alarmas.

EL BARÇA SANGRA POR LA BANDA IZQUIERDA

Un tremendo error de Junior Firpo le costó al Barça un gol en el segundo minuto de partido. Ni la desastrosa primera mitad del Barça fue solamente culpa de Junior, ni el lateral fue el único que naufragó, pero lo cierto es que su actuación estuvo condicionada negativamente por un fallo clamoroso, tras el cual fue a remolque toda la primera parte.

Valverde lo sustituyó (y lo dejó gravemente señalado), pero el recurso de Semedo por la izquierda no mejoró en casi nada la actuación de Junior. Vuelve a ser necesario recordar que el club habría podido recuperar a Cucurella, tras su espléndida temporada en el Eibar, por una cantidad ridícula y prefirió fichar a Junior por más de 20 millones. Pasan los años y nadie sabe cuál es el plan para tener un suplente de garantías para Jordi Alba.