El Barça se complica la vida, pero gana

Pustovyi y Hanga luchan por un rebote con Nacho Martín

Pustovyi y Hanga luchan por un rebote con Nacho Martín / JAVI FERRÁNDIZ

Nacho Solozabal

Nacho Solozabal

Concentración

Se respiraba en el ambiente. Tras la tremenda victoria en el primer partido, el riesgo radicaba en que los blaugrana se confiaran. Dicho y hecho. Los primeros veinte minutos del Barça fueron muy flojos. La mentalidad desde el primer instante fue casi inexistente. El Zaragoza se hizo, con suma facilidad, adquirió el control del juego y se sintió muy cómodo en todas sus acciones. La defensa blaugrana fue inoperante ante un ataque rival que hacía lo que quería.

Sin gastar faltas, perdiendo balones, con porcentajes irrisorios, cediendo el rebote y colapsados en ataque ante las alternativas defensivas que mostró Fisac. Por muchas rotaciones que intentó Pesic, el resultado fue nulo. En la mente de los hombres del Barça me imagino que subyacía la idea de que ya recuperarían la iniciativa cundo se lo propusieran de verdad. Al final fue lo que sucedió, pero adquiriendo más riesgos de los que, a priori, podíamos imaginar.

Reacción defensiva

El Barça maniató al Zaragoza en el tercer cuarto. Supongo que los 15’ de descanso fueron un monólogo de Pesic sobre lo que debían hacer los suyos detrás. Y los blaugrana le hicieron caso. Cuando un equipo del nivel del Barça coloca al límite a un rival como el Zaragoza, lo normal es que los errores se encadenen y pierdan el control del juego. Por mucho que el técnico zaragozano siguiera porfiando en sus variantes defensivas, el Barça cambió la dinámica del partido desde la defensa. Los de Pesic ya no fueron más a remolque.

No obstante, y pese al mazazo recibido, los hombres de Fisac siguieron trabajando con seriedad en busca de una última oportunidad que no llegó. La serie se ha puesto muy franca para el Barça, aunque el próximo partido a domicilio será muy difícil. Si los blaugrana vuelven a saltar a la pista como lo han hecho en el segundo partido, tienen muchas probabilidades de perderlo. Mucho cuidado.