El Barça ganó al Panathinaikos en un partido gris

Jasikevicius dialoga con Kuric durante el partido

Jasikevicius dialoga con Kuric durante el partido / JAVI FERRÁNDIZ

Nacho Solozabal

Nacho Solozabal

JUGARON CON FUEGO

En un partido gris, el Barça hizo uso de su experiencia para ganar un partido que reafirma su trayectoria victoriosa en la Euroliga. El PAO aprovechó las desconexiones blaugranas para estar siempre al acecho, pero le falta consistencia en su juego para poner en entredicho la mayor cualidad del Barça.

Sin duda, los griegos supieron jugar con argumentos como las variantes defensivas en zona intentando evitar, y lográndolo, que su rival se sintiera cómodo a lo largo del encuentro. En ocasiones, el PAO dominó el ritmo del partido a partir de robos de balón y transiciones vertiginosas.

Mientras tanto, los hombres de Jasikevicius especulaban bastante con su teórica superioridad, pensando que siempre estarían a tiempo de resolver en los últimos instantes. Le costó al Barça hacerse con el rebote, y se descompuso en muchas ocasiones después de perder un sinfín de posesiones.

No obstante, el PAO no cuenta en sus filas con demasiados jugadores acostumbrados y preparados para las grandes citas. Fue el triángulo Foster- Mitoglou-Nedovic, con la ayuda de Sant-Roos, el que supo llevar al encuentro a la prórroga. Al final, decidió la mayor consistencia blaugrana

BUSCANDO LA REGULARIDAD

Entre las bajas por la pandemia, las lesiones, y la falta de horas de entrenamiento de grupo, el Barça no acaba de encontrar el pulso a su juego. La ausencia de Mirotic transmite al equipo una cierta sensación de orfandad. Todo lo que el montenegrino es capaz de hacer en momentos clave, ahora debe ser asumido por otros.

No hay duda de que Saras cuenta con piezas fiables como Calathes, Davies o Higgins. Ellos son, ahora mismo, la columna vertebral del equipo. Siempre están presentes en las situaciones calientes, y no acostumbran a fallar. También Abrines entraba dentro de esta categoría, pero ante el equipo griego sufrió una inoportuna lesión. Pero su ausencia la suplió, y de qué manera, un acertado Kuric.

También Hanga es una garantía, aunque últimamente le falta algo de anotación. No es fácil mantener, en estos momentos, un nivel alto de concentración ni de regularidad en el juego. Mientras se va adquiriendo es importante ganar los partidos para que el grupo coja confianza.

Esperemos que el técnico blaugrana pueda pronto tener el equipo al completo. Aunque puede que esta temporada quién sea capaz de adaptarse mejor a todas las adversidades que irán apareciendo tendrá mucho ganado.