El Barça barrió al Madrid

El Barça vivió una tarde redonda en el Palau

El Barça vivió una tarde redonda en el Palau / JAVI FERRÁNDIZ

Nacho Solozabal

Nacho Solozabal

MEJORES EN TODO 

Un partido mayúsculo del Barça. Sin duda, el primer cuarto lo marcó todo, pero la superioridad blaugrana se prolongó a lo largo de todo el partido. La intensidad, las ganas y el impacto físico de los de Pesic borraron de la pista a los merengues. Pablo Laso había pedido a sus hombres que fueran capaces de competir, pero el Barça no les dejó.

Desde una defensa contundente, ante un ataque blanco dubitativo, y controlando con acierto a Campazzo empezó el espectacular dominio blaugrana. Las constantes pérdidas del rival no hacían más que acrecentar la ambición de los de Pesic, que sacaron de la pista a un Madrid ofuscado en ataque.

Hubo a lo largo del encuentro tímidas reacciones blancas, pero en todo momento fueron neutralizadas con celeridad. La línea de tres fue otra vez una aliada de los de Pesic, en especial para un Delaney en estado de gracia. <strong>Dejar al Madrid en tan solo 63 puntos resume lo que fue el duelo</strong>.

COLECTIVO, AMBICIÓN Y ARBITRAJE

El Barça jugó como un equipo. Todos los hombres que saltaron a pista estuvieron a la altura. Absolutamente mentalizados de la importancia del encuentro y con una ambición a años luz de la de su rival. De nuevo Mirotic marcó el camino, pero jugadores como Hanga, Delaney, o un Oriola desbocado, reflejaban en sus rostros que para ellos no era un duelo más.

Por el contrario, los jugadores blancos actuaron durante muchos minutos de manera anárquica y sin liderazgo. Hacía tiempo que no veía a un Madrid que bajara los brazos antes de tiempo. <strong>El tramo final del partido fue un paseo blaugrana</strong>. Es cierto que el encuentro no era decisivo, pero la imagen de un Madrid superado y sin capacidad de reacción creo que no fue una buena imagen para sus seguidores.

Punto y aparte merece el arbitraje. Incomprensible lo que se vio en el Palau. No sé si favorecieron, o no, a algún equipo. Pero lo que es evidente es que su carrusel de personales (inigualable en faltas de ataque) fue un lastre para el partido. Espero que alguien les haga reflexionar.