Opinión

Dudas y contradicciones con Miralem Pjanic

Surgen muchas preguntas sobre el fichaje de Pjanic

Surgen muchas preguntas sobre el fichaje de Pjanic / AFP

Según medios italianos, el Barça acelera su aproximación a Pjanic, centrocampista bosnio de la Juve, que habría aceptado una eventual oferta para vestirse de culé las cuatro próximas temporadas.

A la operación, en cualquier caso, le faltaría todavía lo más importante: un acuerdo entre los dos clubs sobre qué jugador pondría el Barça para el trueque y, evidentemente, el acuerdo del futbolista blaugrana elegido para marcharse al club italiano. Es decir, estamos todavía en una fase muy incipiente del traspaso. 

Lo que es cierto es que el club blaugrana se ha interesado por él. Y la pregunta, entonces, es: ¿por qué? Porque nadie duda de que Pjanic, jugador de toque que a priori podría adaptarse al estilo culé, es un gran centrocampista. Pero ¿necesita realmente el Barça a un futbolista de 30 años? ¿El objetivo no era renovar la plantilla e incorporar a jugadores jóvenes y con hambre de títulos? ¿Qué sentido tendría presionar a Rakitic, con 32 años, para marcharse para luego fichar a Pjanic, con 30? ¿Qué lógica tendría fichar a un centrocampista cuando la plantilla cuenta en esta línea con un espectacular ‘overbooking’ de más de once fichas? ¿La prioridad no era justamente reforzar la delantera (gran punto débil) y la defensa, en la que no hay centrales suplentes con un mínimo de garantías?

Si el fichaje costaría de entender deportivamente, todavía sería más difícil de asimilar desde un punto de vista económico: Pjanic cobra 12 millones brutos en la Juve, donde goza, gracias a la Hacienda italiana, de beneficios fiscales que no existen en España: ¿qué ficha brutal tendría que asumir el Barça para igualarle lo que cobra en Italia? ¿No habíamos quedado que había que rebajar la masa salarial? Y una última pregunta: ¿sería Pjanic el enésimo fichaje que llegaría para tapar la progresión de los jóvenes de la cantera?

El debate no es si Pjanic es o no es un buen jugador, sino si es lo que ahora, y en estas circunstancias, más conviene al Barça. Pjanic provocaría muchas dudas y demasiadas contradicciones. Mucho cuidado con equivocar el objetivo y las prioridades en este trascendental mercado de fichajes.