Ducati no merece ningún esfuerzo más de Lorenzo

Lorenzo, muy molesto con Dovizioso

Lorenzo, muy molesto con Dovizioso / AFP

Josep Lluís Merlos

Josep Lluís Merlos

La semana pasada, y en estas mismas páginas, horas antes de que Marc Márquez se proclamara de nuevo campeón del mundo titulábamos “La suerte de disfrutar de “Leo” Márquez”. Al parecer, la idea gustó profundamente, puesto que durante los últimos días no han sido pocos los medios que se han apropiado de la misma en sus contenidos. De nada.

Es lógico. Los grandes héroes del deporte tienen una capacidad sobrenatural de penetración en el subconsciente colectivo, una habilidad monstruosa para instalarse en nuestras mentes como el troyano que invade un disco duro. Esa es otra de las grandezas del deporte, que suele ponernos a todos de acuerdo en el reconocimiento del talento, incluso aunque este forme parte de las huestes enemigas. Ni los más acérrimos seguidores de Leo Messi osarían jamás dudar de la calidad de Cristiano Ronaldo, y al revés. Otra cosa es la altura del pedestal en el que decidan encumbrar a su ídolo.

Decíamos que conviene disfrutar de Márquez, como de Messi, o de cualquiera de los otras leyendas del deporte con los que hemos tenido la suerte de coincidir cronológicamente. Que a veces, como sucederá este domingo con la ausencia del argentino en el Clásico o con la baja de Lorenzo en Phillip Island por lesión, vivir eventos sin algunos de estos protagonistas no deja de ser un ejercicio de profilaxis interesante.

Me hubiera gustado que Jorge corriera en Australia, porque eso implicaría que su lesión ya ha quedado atrás. Pero, con todo el respeto por Bautista, me habría encantado que el lugar del mallorquín lo hubiera cubierto Casey Stoner. Con la Ducati y en su feudo. La batalla entre CS27 y Márquez prometía grandes sensaciones. Pero hasta para esto los de rojo son así de torpes.

El de Cervera ha dicho que tiene  ganas de medirse contra otro campeón con una moto idéntica. El año próximo tendrá la oportunidad, con la llegada de Lorenzo a las filas del equipo Honda-HRC, una vez que Jorge –lógicamente- haya superado el proceso de adaptación a su nueva moto, tan diferente a la actual.

En el fondo, celebro que el 99 no corra este fin de semana. Ducati, por la forma como le ha tratado, no merece más esfuerzos. Lo importante ahora es que se recupere para estar en Valencia. La carrera en Cheste es lo de menos; los de Borgo Panigale sólo se han ganado un portazo. Lo importante es el test que hará allí, en el Ricardo Tormo, dos días después de la última cita, ya con la Honda. Ilusión.