El drama de las salidas ahoga al Barça

Ronald Koeman, dirigiendo al Barça en Ipurúa ante el Eibar

Ronald Koeman, dirigiendo al Barça en Ipurúa ante el Eibar / Javi Ferrándiz

L. Miguelsanz

L. Miguelsanz

En una economía tan castigada y con los clubes en una ruina sin precedentes, el Barça ha decidido arriesgar en el mercado firmando a casi todos los objetivos antes del 30 de junio. Ya han llegado Agüero y Eric Garcia y en los próximos días, salvo sorpresa, se anunciarán los fichajes de Wijnaldum y Depay. Es cierto que muchas de estas operaciones venían bien trabajadas desde el pasado y que el club no ha desembolsado un euro porque aterrizan con la carta de libertad, pero tanto fichaje provoca un colapso y un overbooking que asusta. En estos momentos, el Barça tendría a casi 30 jugadores en plantilla tras una apuesta arriesgada pero también meditada que esperan que acabe saliendo bien. Porque los fichajes son un aviso a navegantes hacia aquellos futbolistas que no van a tener minutos y que ya saben que deberán salir sí o sí de la entidad. Por muy duro que sea, el club blaugrana se verá obligado a empujar fuera del Camp Nou hasta diez jugadores -alguno de ellos formados en la casa y queridos por la afición-, como única solución para evitar una catástrofe deportiva y económica que solo se empezó a revertir el verano pasado con muchos jugadores regalados.

La operación salida del Barça es un auténtico reto que, de no salir bien, ahogará al club en los próximos meses. Es cierto que la estructura deportiva se ha mostrado precisa y competente en materia de ventas y cesiones en los últimos años consiguiendo operaciones imposibles. Es el momento de tirar de contactos, de apretar a futbolistas que aquí están acomodados y muy bien pagados, y de encontrar fórmulas imaginativas para ahorrarse muchísimo dinero y cumplir con el límite salarial. Habrá muchísimas sorpresas en las próximas semanas. Caerá alguna vaca sagrada, algunos jugadores con teórica proyección y proyectos de estrella. Habrá de todo. Y lo importante es no dudar porque es probable que en algunas bajas no se acierte y acaben triunfando fuera de aquí, pero al club no le queda otra que ir al límite. Vienen semanas duras.