Dos titulares y cantera: ese es el camino

A estas alturas, el Barça ya había fichado la pasada temporada. Firmó a muchos jugadores por un montante económico millonario con la excusa de que lo que había en la plantilla era inmejorable y que solo se necesitaba fondo de armario. Buena teoría sin resultados deportivos. Un año después, la idea del club ha cambiado con el objetivo de volver a los orígenes. Ahora se intenta fichar, como máximo, a dos jugadores de primer nivel mundial y, lo demás, que salga de la cantera o se recupere de cesiones y ventas con recompra por el mundo. Y aciertan. Porque lo único cierto es que el equipo necesita especialistas en un par de posiciones. Y deben venir los mejores del mundo para jugar con los mejores del mundo. La apuesta es traer a Bellerín y Verratti. Pagarán por dos lo que pagaron por seis el año pasado y lo más probable es que el equipo evolucione más y mejor.

Ir al mercado cada vez es más complicado. Competir con magnates, jeques y empresarios chinos lo pone difícil. Pero el Barça juega con esa aura que atrae a estrellas internacionales. Y solo así se entienden las apuestas por Bellerín y Verratti. Uno ha sido capaz de decirle ‘no’ al City y, el otro, está forzando la máquina para dejarle claro al todopoderoso PSG que se va. Y no por dinero sino por argumentos deportivos.

Verratti y Bellerín serán titulares. Indiscutibles. Si acaban fichando vendrán para cumplir una clara misión de mejorar lo que hay en sus posiciones. Y el resto, si falta algo, deberá llegar desde la cantera. El gran Barça de Guardiola se construyó así. Con protagonismo de canteranos y con fichajes indiscutibles. A partir de ahí, el club tiene la obligación de mejorar la calidad de lo que viene de abajo. Subir al filial a Segunda A es el primer paso para comenzar una nueva era. Si la apuesta sale bien, hay tiempo para iniciar otro ciclo de éxitos.