El dominó definitivo de la temporada

Hoy empieza una semana grande, que puede convertirse en el dominó definitivo de la temporada. El calendario ha quedado encadenado de tal manera que una victoria del Barça en Sevilla restaría presión (e importancia) al clásico del próximo sábado, y al mismo tiempo restaría presión al del próximo miércoles. Asegurar la Liga hoy en Sevilla permitiría tener la tranquilidad necesaria para pasar la eliminatoria de Copa del próximo miércoles, que a la vez permitiría encarar los próximos partidos con todas las opciones intactas para ganar el triplete.

A la inversa, una derrota del Barça en Sevilla volvería a dar opciones a Atlético y Madrid de apretar la tabla, una situación que a su tiempo haría más angustiante la disputa de los dos clásicos seguidos, que a su vez podrían influir en las respectivas eliminatorias de Champions de Barça y Madrid. En la rueda de prensa de ayer dio la sensación de que Valverde otorgaba al partido de hoy una importancia mayúscula, y lo resumió en una frase muy clara: "No podemos jugar en el Bernabeu antes que en Sevilla". Un mensaje nada ambiguo que indica que el entrenador blaugrana no está dispuesto a reservar demasiados efectivos, teniendo en cuenta la importancia del partido de hoy en si mismo y por la influencia que puede tener sobre los siguientes.

Se ha pasado ya el tiempo de los experimentos y si Valverde es de natural poco proclive a arriesgar, todo indica que se la va a jugar con todo lo que tenga siempre y cuando el equipo le responda físicamente. Puede ser que la semana que empiece hoy no decida todavía los títulos, pero puede ser la más determinante. De cómo salga el equipo de esta triple etapa de montaña depende en buena medida de cómo afrontará el tramo decisivo de la Champions. Por eso hoy en Sevilla no solo se trata de ganar sino también de recuperar olfato de gol y sensaciones positivas.