La dinámica del Barça de Valverde

El Barça de Valverde vuelve a pasar las Navidades como líder de la Liga. En realidad, desde que el actual entrenador llegó al banquillo del Camp Nou, siempre ha disfrutado de unas excelentes fiestas. Siempre líder a estas alturas de la temporada, lo que avala el trabajo del técnico a pesar de la progresiva pérdida de identidad en el estilo futbolístico que ha venido caracterizando al equipo en la última década. No descubro nada nuevo si digo que la afición no acaba de estar contenta con determinados aspectos del juego del equipo. El marcador dice una cosa y el fútbol, otra. Y no debemos ir tan desencaminados los críticos, o mejor, los más exigentes, cuando la dinámica en los tres años de Valverde registra pequeños descensos. Es decir, que el marcador también refleja los movimientos sísmicos del sistema. 

CLAVE Y SOLUCIÓN

Vamos a ver: en la jornada 18 de la temporada 2017-18, el Barça sumaba 48 puntos con 48 goles a favor y 7 en contra, con trece puntos de ventaja sobre el Madrid, que era cuarto. Una pasada, teniendo en cuenta que venía de ir tercero en la temporada anterior, la última de Luis Enrique, con 38 puntos. Lo de Valverde fue llegar y besar el santo, superioridad total en la Liga... ¡y sin Neymar! En la temporada pasada, la 18-19, la cosa bajó un poco, 40 puntos el Barça con 50 goles a favor y 20 en contra, diez puntos más que el Madrid, que iba quinto. Llegamos a día de hoy, 39 puntos, 47 goles marcados y 21 encajados, solo dos puntos por encima del Madrid, que es segundo. Para los que hacemos caso a las estadísticas, son datos para reflexionar. Se acusa un pequeño desgaste. O, si lo prefieren, se nota que la renovación va más lenta de lo deseado. Los fichajes no han funcionado, la cantera no aporta como antes, o no se confía tanto en ella, y aquí siguen tirando del carro Messi, Piqué, Busquets, Suárez, Rakitic, Alba... todos con dos años más y más de 30 en el DNI. Ahí está la clave y ahí, también, la solución.