La diferencia entre fichar a Rabiot o a De Jong

De Jong siempre quiso firmar por el Barça

De Jong siempre quiso firmar por el Barça / sport

Ernest Folch

Ernest Folch

El Barça afronta en las próximas semanas una crucial renovación de su medio campo, en el que tiene que hacer un delicadísimo encaje de bolillos: debe atraer talento de fuera, debe consolidar de una vez a una o más piezas de la nueva cantera que intenta asomar a pesar de las pocas oportunidades que se le ha dado, y debe también provocar alguna salida, que deje espacio libre y permita financiar las incorporaciones. Todos estos cambios deben cumplir la condición indispensable de mantener la fidelidad al ideario blaugrana, pero a la vez deben ser económicamente sostenibles. Casi nada.

En el esprint final de los fichajes prioritarios en el medio campo, Rabiot es sin duda el más avanzado, pero también ha ganado enteros De Jong tras constatar el club que la joven estrella holandesa se desvive por jugar en el club donde triunfaron muchos compatriotas suyos, Cruyff al frente de todos ellos. Sin embargo, y a falta de ver como se comportarían en el Barça, se trata de dos perfiles diferentes: Rabiot es un jugador completo, de potente zancada y cualidades físicas que saltan a la vista. En cambio, De Jong es puro talento holandés, tiene capacidad de desborde y de conducción y dicen que podría ocupar más de una posición (de Busquets a medio campista adelantado).

Son, pues, dos perfiles muy diferentes, que además provocan distintos grados de entusiasmo: Rabiot es, ante todo, una oportunidad de mercado, que viene libre y que el club ha trabajado bien y lleva mucho tiempo siguiendo. Que venga libre no es un asunto menor: le quita presión ante las críticas y le da cierto margen de maniobra. En el otro extremo, De Jong ofrece unas expectativas mucho más elevadas y un precio alto que puede oscilar entre los 50 y los 75 millones. La diferencia es clara: con Rabiot se compra una oportunidad, con De Jong se compra talento y en teoría una de las grandes estrellas del fútbol europeo de los próximos años. Contratar los dos puede ser peligroso, porque si no hay salidas suficientes puede volver a taparse la cantera.