Descanso para Messi, entre el miedo y la necesidad

El Barça ha empezado a descontar partidos. El propio Valverde lo reconoció en la rueda de prensa de ayer: “Nos faltan seis victorias para ser campeones”. Esta semana, el conjunto blaugrana  puede sumar dos nuevos triunfos en solo cinco días (Villarreal y, sobre todo, Atlético) que pondrían el título a tocar. El camino hacia la octava Liga en once años ha entrado, definitivamente, en su recta final. Y sería interesante asegurarse esta Liga antes del doble enfrentamiento de cuartos de final de la Champions ante el Manchester United. El técnico lo sabe y por eso duda en dar descanso a Messi.

Aunque existe un plan para ir dosificando al crack argentino (aquejado en los últimos meses de molestias en el pubis), prescindir del mejor jugador del mundo en este momento se antoja difícil para el entrenador. Especialmente ahora, que Messi se encuentra en estado de gracia. Valverde se debate, pues, entre el deseo de sentenciar la Liga cuanto antes y la necesidad de cuidar a Leo. Entre el miedo a prescindir del número 1 y la obligación de administrar los minutos del capitán blaugrana.

La lógica (que en el fútbol existe más bien poco) nos podría señalar el partido de esta noche contra el Villarreal (un equipo histórico hundido en la cola de la clasificación, que está luchando por evitar un traumático descenso) como el idóneo para dar descanso a Messi antes de afrontar dos encuentros tan decisivos como los duelos contra el Atlético en el Camp Nou y el Manchester City en Old Trafford. Pero Valverde no lo puede remediar y teme las consecuencias de dejar a Messi en el banquillo (o en la grada). El crack argentino ha marcado cinco goles en los dos últimos partidos de Liga (tres al Betis y dos al Espanyol) y ya lleva 31 en el campeonato. Como para prescindir en estos momentos de su tremenda eficacia...