Desaprovechar la 'era Messi', el gran pecado

Leo Messi no puede con todo

Leo Messi no puede con todo / AFP

Lluís Mascaró

Lluís Mascaró

El gran pecado del Barça, más allá del debate sobre el estilo y el modelo futbolístico, es haber ganado solo una Champions en los últimos ocho años. Sobre todo teniendo, como tiene el Barça, al mejor jugador del mundo y de la historia. Desaprovechar a Messi en su plenitud resulta extremadamente grave.

Es verdad que el crack argentino ha ganado cuatro Copas de Europa vistiendo de blaugrana (en 2006 con Rijkaard, en 2009 y 2011 con Guardiola y en 2015 con Luis Enrique), pero se antojan pocas, muy pocas, ante la trascendencia futbolística de Leo.

Además, lo que ha sucedido en las dos últimas temporadas, con las dolorosas eliminaciones ante la Roma y el Liverpool, aumentan la sensación de fracaso continuado en la Champions. En contraste, por supuesto, con todos los títulos nacionales que se han conquistado en estos mismos ocho años: 5 Ligas y 5 Copas del Rey. La impresión es que la magia de Messi alcanza para ganar en España pero, desgraciadamente, no para hacerlo en Europa.

la comparación de obama

Lo que le sucede a Messi en la Champions con el Barça empieza a parecerse, peligrosamente, a lo que le sucede al propio Messi en los Mundiales (o la Copa América) con la selección de Argentina.

Y es que, como dijo el expresidente de Estados Unidos Barack Obama, el problema de Messi no es Messi sino sus compañeros: “Messi es maravilloso, pero ellos (Argentina) no juegan en equipo y por eso tienen problemas”. Justo lo que empieza a ocurrirle también en el Barça. El camino a seguir está claro: construir ese equipo que pueda ayudar a Messi a ganar la Champions. Así de fácil. O no...