Toda la culpa es de Guardiola

No le den más vueltas. Desde que Guardiola se fue del Barça nada ha vuelto a ser lo mismo. Solo algunas pinceladas de la corta etapa de Tito Vilanova y el triplete conseguido por Luis Enrique recordó por momentos a aquel Barça que lo ganaba todo. Y es normal. Cuando al frente de un equipo está el mejor se nota y, normalmente, los resultados también acaban llegando. Si Guardiola hubiera seguido en el banquillo del Camp Nou en lugar de emprender su aventura por Alemania y el Reino Unido seguro que a día de hoy las cosas estarían mejor y el club no hubiera tocado fondo. ¿Alguien lo duda?

Digo esto porque como escribía ayer Carles Sans en su artículo de este diario, uno también sintió envidia viendo jugar al City el pasado miércoles. Se puede ganar o perder, pero el despliegue técnico, la actitud y motivación de cada uno de los futbolistas que saltaron al terreno de juego está a años luz de lo visto en los últimos partidos en Can Barça. A Xavi no se le puede cargar toda la responsabilidad, aunque debería ir con cuidado de no perder el respeto de sus futbolistas y de sus superiores. La clave del éxito de toda la trayectoria de Guardiola es que siempre se ha hecho respetar tanto por sus jefes superiores, o sea por el presidente de turno, como por sus trabajadores, en este caso los futbolistas.

Guardiola no necesitaba explicar a sus jugadores que no se podía salir por la noche antes de un partido ni tampoco advertir a su presidente que el vestuario es un sagrado. Su arrolladora personalidad, su enfermizo perfeccionismo y su elevado carisma eran suficientes para que cada uno intentara realizar lo mejor posible su misión, sin demasiadas intromisiones y así evitar cualquier riesgo de tenerlo como enemigo. Quizá con Pep tampoco se hubieran conseguido más Champions, pero seguro que el equipo siempre hubiera mantenido una constante competitividad. De hecho, Guardiola, hasta hoy, no ha conseguido ninguna Champions más de las logradas con el Barça, pero sus equipos siempre han transmitido buena actitud y un fútbol vistoso y generalmente efectivo.

Lo dicho. No le den más vueltas. Toda la culpa es de Guardiola. Bueno, quizá una parte corresponde a los directivos, a los futbolistas, al entorno y a parte de la prensa. Porque cuando tienes al mejor también hay que saber respetarlo y cuidarlo para evitar que se canse y se marche. Imagino que algo habrán hecho bien los dirigentes del Manchester City para que ya lleve allí más años que aquí. O sea, más años en el extranjero que en su propia casa y, encima, ganando menos títulos. En fin, que fue tan grande lo que hizo que me temo que el próximo miércoles, si gana el City será mérito de los futbolistas, pero si gana el Madrid será culpa de Guardiola. Es normal que algunos le odien.

Laporta con Oriol Junqueras en Montserrat

La junta directiva del FC Barcelona con el presidente Joan Laporta al frente realizó esta semana una reunión itinerante en la abadía de Montserrat. Tras visitar el monasterio y la reunión ordinaria donde se firmó un convenio de colaboración en el marco del milenario de Montserrat 2025, Laporta se encontrón con el presidente de ERC, Oriol Junqueras, que también este martes también estaba en el monasterio…

 Sandro Rosell visita el club de Silvio Elías

Esta semana se ha inaugurado el primer club social de Barcelona exclusivo para mujeres. Los hombres solo tienen acceso si están invitados por alguna de las 400 socias que ya tiene este espectacular e innovador espacio. A la presentación, además del expresidente, Sandro Rosell, asistió el empresario y exdirectivo del Barça, Silvio Elías que es quien ha financiado a las tres fundadoras del este club llamado Juna House.