Cuando pudo ser Courtois y no Ter Stegen

Ter Stegen ha repasado en una entrevista su trayectoria en el Barça

Ter Stegen ha repasado en una entrevista su trayectoria en el Barça / EFE

Joan Mª Batlle

Joan Mª Batlle

Ahora mismo tenemos a los porteros del Barça y del Madrid en las antípodas de sus carreras. Ter Stegen está en un punto álgido, reconocido por el mundo entero como un portero moderno, con personalidad, reflejos y buen juego con los pies; uno de los mejores porteros del mundo, probablemente el mejor. En el otro lado tenemos a Courtois, sumido en una galopante crisis de juego y confianza, pitado por la afición madridista, con serias dudas sobre su fragilidad de carácter y en medio de una terrible polémica sobre si lo que tuvo el día del Brujas fue un ataque de ansiedad o una gastroenteritis... o, porqué no, un golpe de autoridad de Zidane, cansado de tanta inseguridad en su portería, que había que maquillar con un parte médico poco creíble. Courtois, el portero mediático de Florentino Pérez, cuarenta millones del ala, es, ahora mismo, una caricatura de lo que fue. 

LA HISTORIA. Y sin embargo, la historia podría ser muy distinta. Me refiero a que hubo un momento en que los caminos que han recorrido se cruzaron peligrosamente y solo el destino decidió. Courtois ha estado dos veces a punto de fichar por el Barça. Con diecinueve años, en 2011, el Barça le siguió como una gran promesa de futuro. Costaba tres millones y estaba dispuesto a jugar en el B. Al final se le descartó y al cabo de un mes le fichaba el Chelsea, que lo cedió al Atlético. Pero el momento clave fue cuando había que sustituir a Valdés. Zubizarreta apostó y apalabró a Ter Stegen, pero una parte de la directiva quería a Courtois, incluso viajaron a Madrid para sondearle y hubo un debate interno de cierta virulencia. Finalmente Zubizarreta consiguió traer a Ter Stegen. Pero hay más, en 2016, cuando Ter Stegen llevaba dos años de suplente de Bravo y se temía que pidiera el traspaso, se volvió a pensar en el belga, cuyo representante lo había ofrecido meses antes. Esta vez no hubo dudas: Ter Stegen a tope. El resto ya lo saben: Florentino Pérez quería un portero con más glamour que Keylor Navas y soltó cuarenta kilos por un irreconocible Courtois. ¡De la que se libró el Barça!