Cuando el equipo deja solo a Messi

Leo Messi ha tenido la mejor ocasión del Barça en la primera parte

Leo Messi ha tenido la mejor ocasión del Barça en la primera parte

Joan Mª Batlle

Joan Mª Batlle

Fue un clásico decepcionante, con poco fútbol y, en consecuencia, cero goles. Decepcionante, por lo que respecta al Barça, por la disposición táctica de Valverde y la falta de control, presión e intensidad del equipo. Decepcionante, por lo que respecta al Madrid, por la falta de remate y profundidad de un conjunto que salió con las ideas muy claras y dominó el tempo del partido, pero no supo crear auténticas ocasiones de gol, más allá del balón que sacó Piqué bajo los palos y algún disparo desde fuera del área. Nada extraña la carencia madridista, ya que la falta de pegada de sus delanteros, a excepción de Benzema, es realmente alarmante. Muy preocupante, en cambio, la imagen del equipo de Valverde. Mal situado tácticamente, superado en el centro del campo por la superioridad numérica del rival y sin conectar con Messi, especialmente, ni con Suárez y Griezmann, lo que le condenó definitivamente porque su fuerza radica cada vez más en la calidad individual del tridente. 

ZIDANE GANA A VALVERDE

Quedó claro que Zidane le ganó la partida a Valverde. La pizarra del francés movió el partido durante la mayor parte de los noventa minutos. Tampoco es ningún descubrimiento que el Madrid se ha hecho fuerte en el juego colectivo, con ese Valverde que marca la raya en el centro del campo, el equilibrio defensivo de Casemiro y la posición entre líneas de Isco. Un Madrid solidario, con buen trato de balón y una fuerte presión que maniató la salida de balón de la defensa azulgrana. Aquí tuvo el primer problema Valverde, que ensayó una nueva línea medular precisamente en el peor momento. Error de planteamiento inicial que no se subsanó con la entrada de Arturo Vidal y que dejó al Madrid el dominio de la zona de creación. Grave equivocación que dejó aislado al tridente y a Messi con pocas posibilidades de entrar en acción. Así las cosas, hay que dar por bueno el 0-0, que es lo más triste de todo. Pero cuando el equipo se aleja del modelo, la esencia y el sistema que le ha hecho grande, cuando el equipo deja solo a Messi, es lo mínimo que puede ocurrir.