Convencer a Messi, el objetivo de todos

Messi, entre los mejor pagados de LaLiga

Messi, entre los mejor pagados de LaLiga / EFE

Lluís Mascaró

Lluís Mascaró

Todos los precandidatos a las elecciones del FC Barcelona merecen el mismo respeto. Los nueve socios que han expresado su deseo de concurrir a los comicios del 24 de enero son unos valientes por asumir semejante reto en las actuales circunstancias. El corte de las firmas marcará favoritismos. Pero está claro que, en estos momentos, hay dos nombres con mayor impacto mediático: Joan Laporta, por su carisma innegable y por su condición de expresidente, y Víctor Font, por su elaborado proyecto.

Toni Freixa, Xavi Vilajoana, Jordi Farré, Agustí Benedito, Emili Rousaud y los menos conocidos Lluís Fernàndez Alá y Pere Riera aspiran a convertirse (Joan Rosell ya desistido) en la tercera vía que pueda competir por el triunfo. Nadie ha ganado todavía las elecciones. De hecho, ni siquiera están convocadas oficialmente. Queda muchísimo camino por recorrer. Con tremendas dificultades por culpa de la pandemia. Y con una campaña que no tendrá nada que ver con todas las que hemos vivido hasta ahora. Por eso, todos los aspirantes tienen derecho a soñar con ser el relevo de Bartomeu.

Ayer, finalmente, saltó al ruedo electoral Laporta. Y lo hizo con un discurso más conciliador, más sereno, más integrador y más moderado. Pero con la conviccion de que si se presenta (no como en el 2015) ahora es para ganar. Laporta centró su discurso en un doble objetivo: devolver el equipo a la primera línea futbolística mundial y enderezar la economía del club, que aseguró que se encuentra en una situación dramática. Abogó por recuperar La Masia para asegurar la viabilidad deportiva y financiera de la entidad. Insistió mucho en que quiere un Barça en el que quepa todo el mundo y rehuyó las etiquetas políticas. Laporta, como todos los precandidatos, espera convencer a Messi con un proyecto ilusionante para que siga en el Barça. Apuesta por dar un margen de confianza a Koeman y, de momento, no quiere hablar de fichajes para no desestabilizar al equipo. Un triple mensaje que podría firmar cualquiera de los aspirantes