Con todos los respetos, señor Van Gaal

Una espléndida entrevista de Diego Torres en el diario El País a Louis Van Gaal ha provocado un intenso debate sobre el equilibrio entre el juego individual y el de colectivo. Van Gaal tiene la virtud de ser directo y decir lo que piensa. En la entrevista ha sido una vez más contundente: “Neymar y Messi me gustan como futbolistas individuales, no como jugadores de equipo“, y como prueba de la poca contribución de Messi y Neymar al juego colectivo se pregunta: “¿Cuántas Champions ha ganado Messi? ¿Cuántas Neymar en el PSG?”.

Cualquier cosa que diga Van Gaal es interesante, pero en este caso parece poco consistente. Acusar a Messi de practicar un juego individualista que no está al servicio del equipo es sencillamente ignorar la realidad: solo por aportar un dato, Messi ha sido el máximo asistente de LaLiga en las dos últimas temporadas. Y más allá de cualquier estadística, no hace falta ser un catedrático del fútbol para ver la influencia decisiva de Messi sobre el juego colectivo del Barça, y su conocimiento profundo del ADN blaugrana.

Y convertir a Messi casi en culpable de la no consecución de las últimas Champions raya lo grotesco. Van Gaal fue un gran entrenador, pero no está exactamente en la mejor posición para dar lecciones a Messi. Consiguió una Champions de mucho mérito con el Ajax, pero en el Barça su palmarés está en un segundo escalón, muy lejos de Cruyff, Guardiola, Rijkaard o Luis Enrique. Van Gaal estuvo 4 temporadas en el Barça (3 en la primera época, 1 en la segunda), en las que consiguió 2 Ligas, 1 Copa y 1 Supercopa de Europa, pero fracasó en Europa.

Sería injusto juzgar al entrenador holandés solo por los títulos, porque su gran legado fue sobre todo su apuesta por Xavi, y por la cantera en general, a quien dio un rol prioritario que hoy se echa en falta. Sin embargo, también él debería preguntarse por qué no pudo ganar la Champions a pensar de contar con un gran equipo. Con todos los respetos, Sr. Van Gaal.