Un colapso con sabor a fracaso

Mirotic, hundido tras caer ante el Real Madrid

Mirotic, hundido tras caer ante el Real Madrid / AFP

Víctor González

Víctor González

Remar y remar para morir en la orilla. Por segundo año consecutivo, el Barça no supo materializar su condición de mejor equipo de la temporada regular para alzarse con el trofeo más deseado, la Euroliga.

Los de Saras empezaron nerviosos ante un Madrid mucho más compacto en defensa, pero la magia de Mirotic y Laprovittola dio alas al equipo para cerrar la primera mitad con un +11 que no podía hacer presagiar de ninguna forma el colapso táctico del segundo tiempo.

SEGUNDA MITAD INDIGNA

La salida de vestuarios del Barça no fue digna de un equipo campeón. Lejos de jugar con la mentalidad de un conjunto con las ideas claras, los de Jasikevicius se deshicieron como azucarillos en té ardiendo ante las muestras de carácter de un Madrid que, como en el fútbol, nunca se le puede dar por muerto.

La derrota será una herida abierta que marcará lo que queda de temporada y quién sabe si la próxima campaña. El proyecto más ambicioso de Europa, con el mejor jugador (y mejor pagado) del Viejo Continente, se queda con la miel en los labios ante el Madrid más flojo e intermitente de la última década.

La digestión será larga y la paciencia de la afición, hambrienta de gloria europea desde la ya lejana segunda Euroliga en 2010, se pondrá a prueba en los próximos meses.