La Champions, mejor por la vía rápida

Messi, entrenando con normalidad en Milán

Messi, entrenando con normalidad en Milán / EFE

Xavier Ortuño

Xavier Ortuño

No escapa a nadie que uno de los objetivos de la temporada del Barça de Valverde es traer a las vitrinas del club de nuevo una orejona y más tras el dominio blanco en estas últimas temporadas. El técnico blaugrana ya vio el año pasado como el mérito de conseguir LaLiga Santander y la Copa del Rey en una misma temporada se empaña si la Champions la levanta el eterno rival, así que con la lección aprendida y con el primer discurso de Messi como capitán en el Gamper aún resonando en los oídos : “Vamos a darlo todo para que la Champions vuelva al Camp Nou”, el Barça visita el Giuseppe Meazza para acercarse al objetivo europeo. 

Pero antes de soñar en el trofeo que se entregará el uno de junio en el Wanda, hay que empezar por los cimientos y el Barça tiene la oportunidad en Milán de dejar cerrada la clasificación a los octavos de final de la Champions League. Además, con una victoria también se aseguraría la primera plaza del grupo y así estar en el bombo de los cabezas de serie en el sorteo de los octavos de final. 

No habría mejor declaración de intenciones en la competición que en la cuarta jornada de la fase de grupos haber hecho ya los deberes y estar listo ya para estar en el bombo y que la motivación en los dos últimos encuentros tan solo sea la de redondear la clasificación de la mejor manera posible y llenar las arcas del club a base de victorias. O quizás tener la oportunidad de ver a algunos canteranos en acción que también es un buen premio para los chavales que han apostado por jugar en la Segunda División B, para la afición y a la larga para el club. 

Pero lograr los tres puntos contra el Inter no será tarea fácil. El equipo de Spalletti solo ha tenido un tropiezo en los últimos diez partidos y fue contra el Barça en el Camp Nou, así que no les faltarán ganas de quitarse la espinita y demostrar que pueden contra un Barça, que aunque no tenga a Messi desde el inicio en el campo, está también en un gran momento de forma. Ver un poco a Leo, o un mucho si finalmente jugara de titular, ante el Inter también dará por cerrada la ausencia del mejor jugador del mundo por lesión y con un balance de daños impoluto.