El caso Mariano, un obstáculo más

Mariano Díaz, el enésimo canterano sin espacio en el Real Madrid

Mariano Díaz, el enésimo canterano sin espacio en el Real Madrid / EFE

Albert Masnou

Albert Masnou

Quedan diez días para la disputa del City-Real Madrid y uno más para el Barcelona-Nápoles. En silencio más absoluto, sin la presencia de cámaras ni trípodes, se disputa una contrarreloj entre los brotes de coronavirus y los partidos de octavos de final de la Liga de Campeones con la UEFA como árbitro. Dicho organismo mira con lupa todo lo que acontece en España, Italia, Alemania, Inglaterra y Francia, los países con representación en la máxima competición europea. Queda solo una semana y media y los brotes aumentan en todos los países, como una marea que amenaza también a la propia Champions. 

La UEFA estará dispuesta a sacrificar los partidos de octavos de final si esto hace peligrar una seguridad plena en la final a 8 de Lisboa. Y allí están los partidos del Barcelona en el Camp Nou, donde Torra ha amenazado con confinar a Catalunya en el caso de que no disminuya la pandemia, y el del City, donde el gobierno británico ha decidido imponer una cuarentena a los extranjeros, entre ellos que los vengan de España.

Un gobierno y otro, de momento, no se pronuncian sobre la disputa de estos partidos, hacen la vista gorda, pero casos como el de Mariano, afectado por el Covid-19, no hacen más que agravar las dudas de la UEFA en la celebración de dichos partidos. Mariano ha hecho saltar las alarmas.

A ojos de la UEFA, ¿qué diferencia hay entre el Madrid y el Fuenlabrada? ¿Y la UEFA habrá visto cómo ha afectado negativamente a Tebas el caso del Fuenlabrada? ¿Y cómo queda el desarrollo de la competición? ¿Querrá la Champions League que le pase lo mismo que a LaLiga Smartbank? Queda muy poco tiempo para que se tome una decisión pero que a nadie le extrañe que la UEFA tomara el camino de en medio.