Caso Eric Garcia: a la vieja usanza, no; hay que ficharlo en junio gratis

Eric García, en el aire

Eric García, en el aire / AFP

J.Mª Casanovas

J.Mª Casanovas

La campaña electoral del Barça ha entrado en un compas de espera perjudicial para el club, para los socios y para los candidatos. Han pasado tres meses largos desde que Bartomeu dimitiera y la situación económica ha estallado con toda su gravedad. Los culés, sin poder ir al Camp Nou ni votar, están cansados de una Comisión Gestora que dura mas de la cuenta. Los candidatos caen en una polémica en torno a Eric García que se tenía que zanjar en privado, si hacer ruido. El equipo de Koeman lucha por mantener sus aspiraciones con más fe que juego. Y para mayor decepción, ahora resulta que las elecciones políticas se pueden hacer cuando hace una semana se suspendieron las barcelonistas alegando todo tipo de problemas.

Es urgente que el Barça recupere fuerza, poder y liderazgo. Cuando toca poner las bases  del futuro que viene tras el Covid, es necesario tener un presidente capaz de actuar con decisión y experiencia. El modelo del Barça de los 1000 millones de presupuesto y 1000 de gasto es historia tras dejar 1000 millones de deuda. Hay que apretarse el cinturón, mirar hacia la cantera y recuperar el sentido común en la gestión deportiva. Por dicho motivo es triste comprobar que en la campaña electoral, lejos de entrar en temas de fondo, se habla más de Eric Garcia que de Messi.

Victor Font juega la carta de Eric Garcia como si fuera Mbappé, pero el central catalán no es un arma letal capaz de ganar las elecciones. El papel de un candidato no es hacer de intermediario negociando con el Manchester condiciones económicas e intentar imponerlas después a la comisión gestora. Está fuera de lugar y solo se entiende porque en el City esta su amigo Soriano que acepta hablar con una persona que no está autorizada por el Barça para realizar esta gestión. Con todos los respetos para Eric Garcia que me parece un central con mucho futuro, esta polémica no le ayuda en nada.

El central de Martorell es un jugador joven que puede encajar muy bien en la plantilla pero deberá esperar a junio, cuando tenga la baja en el bolsillo, para fichar por el Barça. No se discute su talento, pero no hay que hacer más rico al City a costa de un canterano. Se fue de aquí hace cuatro años sin que pagaran un euro, si vuelve, tiene que ser en las mismas condiciones, gratis. Pagar tres millones más cinco en variables por cuatro meses de competición, es un mal negocio que el Barça no se puede permitir. Hace un año las cosas se hacían así, fichando a Braithwaite por 18 millones aprisa y corriendo con el resultado deportivo que conocemos. En el futuro hay que funcionar de otra manera, con mas responsabilidad económica. Laporta y Freixa así lo han entendido y han frenado una operación que Font proponía hacer a la vieja usanza, aplazando pagos y pasando la factura al que venga. Koeman ya lo tiene asumido con una profesionalidad elogiable mientras que los aficionados barcelonistas aceptan la llegada de Eric Garcia el próximo verano como refuerzo importante del nuevo proyecto.

UN INFORME CONFIDENCIAL CONVERTIDO EN TORPEZA

En el área de fútbol las cosas se siguen haciendo mal. Sin rigor ni profesionalidad. ¿Cómo se puede ofrecer un informe técnico confidencial a la Comisión Gestora para que a su vez lo enseñe a los candidatos? La filtración del documento ha causado profundo malestar en la plantilla. Para destacar el valor deportivo de Eric Garcia no hace falta criticar a Umtiti y Mingueza argumentando que el jugador francés no es fiable por las lesiones y que al canterano no está preparado para los partidos importantes. El informe de la secretaria técnica redactado por Ramón Planes con el objetivo de recomendar y avalar el fichaje del central del City se ha convertido en una torpeza ya que, además, no conseguirá su objetivo. Pero hay más, el informe reconoce que el club quiere traspasar a Junior, Umtiti y Neto a final de temporada. No es coherente que si quieres vender a Umtiti lo devalúes dejando escrito que “por la lesión que tiene es difícil que pueda jugar partidos de alta exigencia.” Lamentablemente el Barça ha funcionado así en los últimos años, por lo tanto no nos extraña el lío montado en el frustrado fichaje de Eric Garcia. Ya no es una cuestión de dinero, es una cuestión de incompetencia. La carencia de estrategia de la secretaria técnica viene de lejos. Por cierto, si algún día conocemos los informes que recomendaron los fichajes de Coutinho y Dembele, más de uno se tendrá que esconder.