El 'Carde' quiere ascender

Estamos acostumbrados a demasiado boato futbolístico y mediático, por supuesto. Estamos acostumbrados a que solo informamos, contamos historias y nos deleitamos con los grandes protagonistas, especialmente del fútbol, claro, que es el deporte que más arrastra y por el que casi todo el mundo siente una devoción desmedida.

Solemos contar todo lo que sabemos e, incluso, a veces, lo que intuimos, lo que nos cuentan, los rumores que suenan y una enorme diversidad de historias tan sorprendente que, a veces, ni siquiera son verdad. Y, encima, las redes sociales se han convertido, no ya en una mala competencia, sino en algo muy dañino para nuestro oficio.

Lo cierto es que no viene mal echar la mirada hacia otro lado, no ya tanto a otros deportes, que también, sino, incluso, dentro del enorme, del grandioso, del tremendo balompié, mirar hacia los modestos. Sí, ya sé que muchos de ustedes son seguidores, hinchas, aficionados apasionados de clubs modestos, de sus pueblos, de sus barrios, del lugar donde nacieron y que no le quitan ojo a lo que hacen.

Sant Llorenç des Cardassar

Yo, por cuestiones profesionales, he estado estos días enfrascado en historias ocurridas en el pueblo mallorquín de Sant Llorenç des Cardassar, a poquitos kilómetros del Manacor de Rafa Nadal, ya saben. Y durante esos días he podido palpar, no solo la enorme capacidad de sacrificio, complicidad, colaboración y predisposición a todo de sus habitantes, vecinos e, incluso, de toda la isla, sino su cariño por el equipo de fútbol.

Desde el primer momento, el CD Cardassar, más conocido popularmente como el ‘Carde’, que el año pasado descendió de categoría tras una pésima temporada (de Preferente a Primera Regional), ha sido uno de los puntos de encuentro de todo el pueblo. Y es que, tal y como me contó su nuevo presidente, el biólogo Jaume Soler, hacia pocos meses que la nueva directiva se había hecho cargo del equipo y diseñado una plantilla para tratar de volver a Preferente y, no solo eso, sino soñar con alcanzar la Tercera División inmediatamente.

Y en ello están pese a que, aquel 9 de octubre horrible, el agua se llevó por delante todo el campo de fútbol, arrasando con toda la instalación y haciendo desaparecer todos los enseres, incluida la lavadora, la caldera y los uniformes de casi los 11 equipos que tiene el ‘Carde’.

El campo recobra vida

Desde el primer instante, el Ayuntamiento, liderado por su alcalde Mateu Puigròs y Antonia Bauzà, quisieron que el campo de fútbol fuese una de las instalaciones que recobrase vida en cuanto se pudiese. Y, sí, no solo está ya totalmente en pie, nuevo, sino que este fin de semana jugarán el primer partido amistoso, después de haber estado de prestado en Cala Millor, cerquita de Sant Llorenç.

Lo cierto es que el fútbol siempre ha sido el principal deporte de Sant Llorenç des Cardassar y alrededor del ‘Carde’ ha habido mucha vida, tanta que es de los pocos pueblos que intenta confeccionar una plantilla de chicas para hacer su propio equipo femenino, cosa que le será difícil a la directiva de Soler porque el pueblo no tiene tantas chicas que quieran jugar. De ahí que el presidente le esté dando vueltas a poner de acuerdo a varios pueblecitos de la comarca y crear una estructura para que todas las niñas que lo deseen puedan jugar juntas.

Se diría que el ‘Carde’ está recobrando la actividad con el mismo brío, ganas, ilusión y complicidad que lo hace el pueblo. Si antes temían que les costaría horrores volver a Preferente, ahora tienen clarísimo que lo van a conseguir este mismo año, perdón, el que viene, de la mano de Toni Font, un entrenador que ha logrado más de uno y dos ascensos en los últimos años. Con Font, el ‘Carde’ juega muy sólido, apuntalando, principalmente, la defensa, en el mejor estilo del Atlético y contragolpeando con velocidad y precisión. Es más su portero, Pere J. Llull, de 24 años, albañil de profesión pero que quiere ganarse la vida como profesional, es el guardameta menos goleado de todas las divisiones de Mallorca, habiendo encajado solo siete goles en los 17 partidos de Liga que se llevan disputados.

500 socios

El ‘Carde’, que antes apenas tenía medio centenar de socios, ahora ha superado ya los 500 y es, créanme, el club con más publicidad en su campo: 99 anunciantes, a razón de 250 euros al año por cartel. Eso sí, el del marcador y el del túnel de vestuarios, mucho más visibles, valen el doble, 500 euros, y ya están vendidos.

“El fútbol es maravilloso. El fútbol une, promueve la convivencia, mueve a todo el pueblo, es lugar de encuentro y, sobre todo, aquello que nos hace sentir vivos, cómplices de algo tan hermoso como empujar, animar, ser uno. El ‘Carde’ tiene el espíritu de los mosqueteros y vamos a lograr el ascenso, ya verás. El ‘Carde’ es la viva representación de un pueblo que se levanta”, afirma Jaume Soler, su orgulloso presidente.