¡Qué bonita está la Liga!

Barça - Valladolid

Barça - Valladolid

Gerard López

Gerard López

LaLiga está más viva que nunca. Los últimos resultados han recudido la ventaja del Atlético de Madrid con respecto al Barça y al Madrid y ahora los tres equipos están en un puño, en disposición de jugarse el título en las próximas nueve jornadas. Será un final de temporada bonito y precioso, una emoción que parecía no existir en la primera vuelta del campeonato en la que el Atlético iba a otro ritmo. Hoy, colchoneros, madridistas y azulgranas dependen de sí mismo para ser campeón lo que supone el inicio de una nueva competición. Pese a que aún se ve un equipo entero, los de Simeone están llenos de dudas y han perdido esa jerarquía de la primera vuelta en la que exhibieron un nivel espectacular, casi irreal. Esta competición es la de la regularidad y el tiempo te acaba poniendo siempre en tu lugar.

Cambio de dudas

Las dudas que tenía el Barcelona al inicio de curso están ahora en el seno del Atlético y la tranquilidad y confianza que demuestra el equipo de Koeman le sirve para encadenar un 2021 sensacional hasta colocarse en una situación privilegiada. La victoria de ayer ante el Valladolid es una muestra más de esta suficiencia con la que gana los partidos, con la que suma puntos y con la que recorta distancias con el Atlético.

El clásico será el primer momento importante de este rush final pues se trata de dilucidar quien será el rival del Atlético, el líder: O Barça o Madrid. El favoritismo ha cambiado y hoy es el Barça el que arrastra mejores sensaciones. Por estado de ánimo, por estar en la final de copa, por juego, el Barça está en la pole pero un clásico es un clásico y todo puede pasar. El Madrid, cierto es, cuenta con la desventaja de tener hoy un partido de Champions, una competición muy llamativa para sus jugadores. Será un partido duro contra el Liverpool y seguro que le desgastará. El Madrid depende del clásico porque si lo pierde se dedicará a la Champions.

El otro partido importante, que quizás acaba siendo el final de Liga, es el Barça-Atlético en el Camp Nou. Pero para eso, aún queda bastante. Lo que sí auguro es que los tres equipos no van a perder muchos puntos en las nueve jornadas que tienen por delante. Es el momento de dar la cara y no van a fallar.

Un dibujo igual

Hay un aspecto táctico significativo que a una Barça, Atlético y Madrid. A diferencia de tiempos pasados recientes, los tres equipos comparten el mismo estilo de juego. Y, como consecuencia, en estos duelos directos no se prevén sorpresas notables. El funcionamiento del dibujo que usan Koeman, Simeone y Zidane es simple: Los jugadores que aguantan al equipo están por dentro (tres centrales, tres centrocampistas y dos delanteros) mientras que los que acaban decidiendo muchas veces son los laterales, que aprovechan el factor sorpresa para incorporarse y para romper líneas. Ellos defienden y atacan.

Es un sistema que está de moda en el fútbol europeo y que permite a los equipos sentirse cómodos y protegidos. Los grandes de España también han recurrido a él. Este paso era inimaginable hace una temporada en la que Barça y Madrid, por ejemplo, jugaban con tres puntas. En todo caso, empieza una mini nueva competición con un futuro incierto pero repleta de emoción. Disfrutaremos.

Una locura llamada Haaland

Plantearse la contratación de Erling Haalandes una locura en mayúsculas para el Barcelona dada su situación económica. El momento no es el adecuado para hacer un gasto de este calibre, una inversión elevadísima por tratarse del jugador del momento. El Barça parte, además, con desventaja con respecto Madrid, Liverpool...

Vuelve la emoción de la Champions

Esta semana vuelve la Champions League con la disputa de los cuartos de final. Hay partidos muy interesantes como el del Madrid-Liverpool o el City-Borussia. El nivel no baja el miércoles con otros dos partidos excitantes como es el caso del Bayern-PSG (la final del año pasado) o la del Porto-Chelsea.

El incidente racista, un callejón sin salida

Lo ocurrido durante el transcurso del Cádiz-Valencia entre Cala y Diakhaby está en un callejón sin salida. Las acusaciones de racismo por parte del Valencia se encuentran con el desmentido del Cádiz y sin que haya testimonios televisivos que den la razón a unos u a otros. Es un incidente de difícil solución.