Bartomeu reúne a su directiva

Las decisiones de la directiva de Bartomeu, en el punto de mira

Bartomeu, ex presidente del FC Barcelona / EFE

Joan Vehils

Joan Vehils

Algunos no se habían visto las caras desde que dimitieron en octubre del 2020. Sin embargo, todos respondieron al WhatsApp que Bartomeu envió al grupo, todavía activo, de su junta directiva y aceptaron con gusto cenar en el restaurante ‘La Venta’ de Barcelona para dar por concluida la temporada de la que ellos han sido partícipes. Fue hace dos semanas. Uno de los presentes me explica que el motivo era valorar y cerrar la etapa vivida en el Barça, pero hablaron de todo. De temas deportivos, económicos, sociales y, también, del ‘Barçagate’. Solo faltó el directivo Jaume Carreter, al encontrarse de viaje fuera de Barcelona, y Javier Bordas y Dídac Lee, ambos por motivos profesionales. Asistió la asesora cultural de la junta, Teresa Basilio. Durante la cena, los exdirectivos hablaron de sus experiencias en cada una de sus áreas mientras Bartomeu llevaba la voz cantante. Incluso en alguna ocasión tuvo que dar explicaciones a preguntas de los que fueron sus colegas de junta. Se reconocieron errores y hasta Laporta se llevó algún que otro elogio. 

PRESIONES DE MESSI Y LUIS SUÁREZ

Respecto al área deportiva, se valoraron positivamente los éxitos del fútbol femenino y resultados de las secciones, y más de uno mostró ‘estar alucinado’ por los despidos de Xavi Pascual en el balonmano o de Andreu Plaza en el fútbol sala. Respecto al primer equipo, nadie entiende el desastroso final de Liga y admitieron que siempre jugaron al límite con la masa salarial. Asumieron que nadie podía vaticinar una pandemia de estas características que lo trastocó todo y el propio Bartomeu reconoció que hubieran tenido que ser más duros en determinadas renovaciones. Además, en una de las dos mesas en las que se repartieron por temas de covid, se comentó, para sorpresa de alguno, las presiones que recibieron los responsables del área deportiva por parte de Messi y Suárez para que se fichara a Coutinho. Pues sí, cedieron y se equivocaron. El fichaje fue un absoluto fracaso. Y, claro, como consecuencia de este tipo de contrataciones y la negativa de los jugadores a bajarse los sueldos, reconocieron abiertamente que la actual situación financiera del club es muy complicada y que no hay otra salida  que los futbolistas se bajen más los sueldos como han hecho los del Madrid, la Juventus y algunos de los grandes clubes de la Premier. 

LA REVISTA ‘FORBES’

Otro de los allí presentes me comenta que también se habló de lo poco que se ha valorado el artículo de la revista ‘Forbes’, en el que destacaba que el Barça es el club más valioso del mundo desbancando al Real Madrid. Por cierto, este mes, es Messi quien ocupa la portada de la revista ‘Forbes’ en Argentina. Sobre los aspectos positivos se resaltó también la victoria en los tribunales del recurso de la CUP para paralizar el proyecto del ‘Espai Barça’. Ahora, por fin, ya existe vía libre para la remodelación del Camp Nou. Otra cosa será ver de dónde sale el dinero… Y, claro, habló del ‘Barçagate’ y Bartomeu explicó que los Mossos todavía no le han devuelto ni el móvil ni el ordenador. Se mostró tranquilo y reiteró que solo se había visto una vez con el jefe de I3 Venture, Carlos Ibáñez. Fue el día que le contrataron junto al CEO, Òscar Grau, y el director del área de presidencia y junta directiva, Jaume Masferrer. Desde entonces, explicó Bartomeu, no ha vuelto a hablar con él y fue Masferrer quien asumió el papel de interlocutor. A todo eso, Bartomeu comentó que no entendía ni sabe quién ordenó esos mensajes contra futbolistas, candidatos o empresarios y recordó que, en la reunión con Ibáñez, este le explicó que uno de sus clientes era CaixaBank. Ahora todo este asunto tan oscuro está en manos de la justicia. Esta semana ha declarado Carlos Ibáñez y tras el verano lo hará Bartomeu. Veremos cómo y cuándo acaba. Porque todo lo que sea vincular al club con la justicia a quien más perjudica es a la imagen del Barça.

ELOGIOS A LAPORTA

Finalmente, el propio expresidente elogió al presidente Joan Laporta por su actitud y valentía y por aguantar las presiones sufridas respecto al apoyo a la Superliga europea de fútbol. El hecho de mantenerse firme, sin renunciar a este proyecto, sin bajarse del barco fue valorado positivamente. En fin, un balance agridulce para otra junta directiva que sale por la puerta trasera y con problemas con la justicia. En fin, esto es el Barça.