Bartomeu se agarra a un milagro

Bartomeu está acorralado. Los escándalos se multiplican. La mala gestión le señala. Y el presidente está, irremediablemente, contra la pared. Solo el equipo, que sigue vivo en la Liga y en la Champions, evita, por el momento, lo inevitable: el adelanto de las elecciones. El impacto de la noticia ofrecida ayer por el programa ‘Què t’hi jugues’ de la SER, según la cual el Barça ha contratado los servicios de una empresa de big data (I3Ventures) para erosionar a través de las redes sociales la imagen de jugadores, exjugadores, periodistas, candidatos y políticos, provocó un nuevo terremoto que hizo tambalear los cimientos del Camp Nou.

El club se apresuró a negar una parte de la información, pero la mancha de la duda vuelve a salpicar a esta directiva. Una vez más. Solo el fútbol, insisto, puede salvar a Bartomeu. El presidente se agarra a la esperanza de los títulos como a un clavo ardiendo. Aunque lo hace, precisamente, en un momento extremadamente delicado para el equipo, que sigue generando muchísimas dudas en torno a su rendimiento y, sobre todo, a sus posibilidades de éxito. 

Pensar que este Barça está capacitado para ganar la Champions resulta, ahora mismo, una quimera. En la Liga todo es posible, porque el Madrid está igual o peor que los blaugranas. Solo un punto separa a los equipos de Zidane y de Setién con 14 jornadas por disputar y un clásico a la vuelta de la esquina. Pero Europa exige un rendimiento extraordinario. Obliga a la perfección. Y, sin duda, lo vamos a comprobar en los octavos de final que empiezan hoy con un apasionante Atlético-Liverpool. ¡Qué lejos está el Barça actual del mejor equipo del mundo que lidera Klopp!