Barcelonistas vs Messi

Messi se sube al barco del proyecto Koeman (ES)

Messi se sube al barco del proyecto Koeman

Xavi Torres

Xavi Torres

Las palabras de Leo Messi deben ser escuchadas no solamente por tratarse de la mayor leyenda azulgrana de la historia sino también porque desde hace tiempo, cuando habla, lanza mensajes llenos de sentido. Esta vez, dada la gravedad de la situación, su discurso todavía ha sido más deseado. El barcelonismo, tan lleno siempre de matices, ya ha escuchado y, pronto, podrá hablar en las urnas. De momento, un sector de la afición ha decidido criticar a su capitán por querer salir del Barcelona tras el doloroso 2 a 8 del Bayern y con el barco, hundiéndose. Eso, a pesar de haber avisado en público y en privado de la degradación colectiva, de sufrir la gestión de los fichadores y las mentiras de su presidente y, finalmente, de la apuesta de éste por la literalidad del texto de un contrato alterado por el coronavirus. A Messi, incluso, se le ha tildado de mal barcelonista.

A él, que lleva mucho tiempo con el paraguas abierto cubriendo a directivos, entrenadores y compañeros de las tormentas que tanto han frecuentado últimamente por el club. Su famoso burofax y las declaraciones a Goal.com lo han convertido en un mercenario. “¡Primero, el club!”, dicen aquellos que, por otra parte, han puesto, con sus votos, a presidentes y juntas directivas que han mandado durante 35 de los últimos 42 años de la vida del Barça.

En frente, otro sector agradece las palabras de su capitán porque creen que les acerca a la realidad del FC Barcelona, ese club que hace muy poco era el modelo a seguir y que hoy se mueve entre la vergüenza y el esperpento. Este grupo, que en su mayoría es feliz con la permanencia de Messi, señala al presidente Bartomeu por su trayectoria y por su actitud ante la mayor leyenda del club, cuentan, para salvar su cabeza tal y como ya hizo en 2016 permitiendo que el Barcelona fuera condenado por primera vez en su historia por dos delitos fiscales. También discrepa del anterior grupo de aficionados en su visión del periodismo, a quien reclama profesionalidad y no el carnet de buen barcelonista. Será fácil encontrar estos días a muchos de estos seguidores firmando la moción de censura para tratar de provocar un nuevo rumbo en la gestión de la entidad.

Para la reflexión final de unos y otros defiende el sabio Alfred Julbe la excelente teoría de la inercia y de la herencia. Se trata de analizar qué Barça recogió cada presidente y qué Barça dejó en el momento de su salida. El ejercicio es extraordinariamente higiénico aunque algunos defienden que, a la hora de la verdad, no sirve para nada.

FUTURO

Año electoral. En el lógico debate sería interesante que los candidatos no se centrasen únicamente en los nombres de los cracks que van a fichar y pudieran abrir la discusión sobre el auténtico valor de La Masia. Se trataría de que el club entendiera que el árbol no puede vivir sin raíces y que, sin alma, no hay éxito.

De momento parece interesante la apuesta del directivo Xavi Vilajoana en el filial, asumiendo con naturalidad la salida (total o con opción de recompra) de ilustres como Akieme, Chumi, Collado, Cuenca, Manaj, Matheus Pereira, Monchu, Peña, Reis o Saverio y permitiendo el ascenso de los jugadores juveniles más destacados, como Tenas (portero); Rosanas, Igor, Mika, Balde (defensas); Nico, Sanz, Illaix (centrocampistas); Konrad, Jardí, Mortimer y Peque (delanteros). Algunos de ellos ya han debutado y otros, incluso, acabaron la temporada pasada como titulares en el once de García Pimienta.

El Barça B será el equipo más joven de Segunda División B con mucha diferencia respecto al resto de los equipos. Como debe ser. Y tal vez no ascienda a Segunda A. Puede pasar. Pero su función es la que es, a saber, preparar futbolistas para el primer equipo. La renovación ha de ser permanente, sin miedos, sin tapones que obliguen al exilio, con la valentía de apostar por el talento y el trabajo y con la ambición de ponerle las cosas muy difíciles al entrenador del primer equipo.

FATI Y PUIG 

<strong>Ansu se salió en la selección española absoluta</strong> y Riquien la sub-21. El Barça es el Barça y en el Barça siempre hay que ganar pero ya no hay dudas: el objetivo también es posible con ellos. Solamente hace falta que Koeman les abra la puerta de la titularidad sin complejos. 

UMTITI

Delicada situación del central francés, con contrato con el Barcelona pero sin opción a jugar. No es su culpa. Las lesiones lo han martirizado pero alguien firmó lo que no debía a pesar de los consejos de los doctores. ¿Y ahora, qué? Una tras otra…