Opinión

El Barça tiene una serie

La oposicion pide la dimisión de Laporta y amenaza con una moción de censura

EFE

Créanme, el Barça tiene una serie de ficción de las buenas, y con bastantes capítulos. Hace unos días leía en 'X' un comentario sarcástico que decía: “No hay ningún club en el mundo más entretenido que el Barça”. Y es cierto, porque el entretenimiento muchas veces no viene del terreno de juego, sino del entorno, de la directiva, de personajes que merodean por el club sin que se sepa su cometido, de muchas parcelas, en definitiva, que van más allá de lo deportivo.

El aficionado está nervioso, son muchos los vaivenes que está dando el club tanto en lo deportivo como en lo ejecutivo. Promesas continuadas de mejora que no acaban de ser siempre como nos las cuentan, salimos del 'fair play' financiero, volvemos a la norma 1:1 pero sin las garantías de que esta cubra, no ya los fichajes de futuro, sino la propia incorporación de Dani Olmo. Las obras del Estadi se van retrasando sin que se nos aclare si aquello de las sanciones por retraso es cierto o no. Si vamos a lo deportivo, el equipo ha perdido de manera inesperada con equipos muy inferiores, y sin jugar mal ha cedido la primera plaza al Real Madrid, ahora hemos pasado la eliminatoria de la Supercopa y ganarla o no, dadas las circunstancias, tiene más importancia que otras veces.

Este club es un Dragon Khan de emociones, ya hace mucho tiempo que no existe la estabilidad económica ni deportiva. Desde que Koeman fue despedido con poco tacto, pasando por la etapa de Xavi Hernández, que acabó con aquel “me voy, no me voy, le decimos que se vaya”, el Barça ha ido dando tumbos y ni siquiera el espejismo de Hansi Flick ha conseguido amainar las aguas.

Como culer no deseo otra cosa que la recuperación deportiva y económica del club sea un hecho, detesto el mal ambiente que reina desde hace años. Ahora, después de lo sucedido con Olmo y Pau Víctor, surgen opositores que hacen su función y piden la dimisión de una junta muy presionada y que se abre paso a corte de mangas.

No sé cómo acabará la temporada, ojalá se superen los obstáculos administrativos y se remonte en lo deportivo; pero, pase lo que pase, el Barça tiene una serie en la que cabría la intriga, con giros inesperados de guion, algo de humor, mucha tensión, y de momento, sin asesinatos. Pero ¡ojo! No se descarte nada, que sé de alguien que le tiene mucha manía a CAT, la mascota del equipo. Habrá que ver la serie hasta el final.