El Barça de los 'centennials' ilusiona

El Barça de los ‘centennials’ o Generación Z (se denomina así a los nacidos a partir del año 2000) genera ilusión. Mucha ilusión. Jugadores como Pedri, Trincao, Ansu Fati o Sergiño Dest están llamados a ser el futuro, aunque ya han demostrado estar sobradamente preparados para ser el presente. Ser joven, tremendamente joven, no debería ser jamás un handicap. Para nada. Y menos para jugar en el Camp Nou. Si se tiene talento. Que lo tienen. Y mucho. Y carácter. Que también.

Aunque resulte necesario, imprescindible, la valentía de un entrenador que apueste por ellos. Que les dé minutos. Y confianza. Koeman lo está haciendo. Sin reparos. Y la respuesta de estos jugadores está siendo espectacular. Como ya pudimos comprobar el martes en Kiev. Los chavales fueron (junto al bigoleador Braithwaite) los protagonistas de la brillante victoria blaugrana en el campo del Dinamo, que certificó la clasificación del Barça para los octavos de final de la Champions. 

Entre todos estos ‘centennials’ sobresale la figura de Pedri, que ayer, precisamente, cumplió 18 años. Ha jugado más que ninguno (la lesión ha frenado, desgraciadamente, la progresión de Ansu) a pesar de haber llegado al Barça hace solo tres meses. Su calidad va acompañada de una serenidad que le coloca en la rampa de salida para ser un futbolista excepcional. Algunos han querido compararle ya con Iniesta. Y aunque las comparaciones son odiosas (y más entre un niño y una de las estrellas del fútbol mundial), la verdad es que Pedri atesora mucha de las virtudes que ha evidenciado el de Fuentealbilla a lo largo de su dilatada carrera.

Entre ellas, una maravillosa sencillez personal. Algo que se agradece entre tanto ‘postureo’. Pedri ha participado en los 12 partidos disputados esta temporada por el Barça, siendo titular en 7 de ellos, y ha marcado dos goles. Un rendimiento simplemente espectacular que dice mucho de la clase del canario. Y, por supuesto, de la confianza que le ha dado Koeman. La Generación Z está lista para tomar el mando.