El Barça gana sin apretar el acelerador

El Barça superó al ASVEL Villeurbanne

El Barça superó al ASVEL Villeurbanne / JAVI FERRÁNDIZ

Nacho Solozabal

Nacho Solozabal

Un rival conocido

El básquet francés parece siempre cortado por el mismo patrón. Por tanto, el Asvel, por mucho que sea un “novato” en la competición, atesora virtudes y defectos ya conocidos. Un juego físico y agresivo, con buenas dosis de anarquía que provocan un sinfín de pérdidas, y que se mantienen dentro del partido hasta que un rival de nivel los acaba desgastando.

El Barça sufrió en un inicio de duelo marcado por los constantes 1x1 de los franceses, los posteriores balones doblados y un gran acierto en el triple. Pero un equipo que no tiene juego interior, no controla el rebote y no fuerza faltas, tiene un recorrido limitado. Los de Pesic sólo necesitaron jugar una primera parte seria y con criterio para empezar a marcar distancias con el Asvel. Como sucede habitualmente, Mirotic tuvo un inicio de partido espectacular. Luego acabó diluyéndose en la mediocridad general, excepto pinceladas de Davies y Higgins, y un cada vez más sólido Abrines.

Continúan las desconexiones

Todo y comprender que es casi imposible mantener un ritmo constante de esfuerzo y concentración a lo largo de un partido, preocupa un poco las habituales bajadas de tono de los blaugranas. Nada serio, de momento, pero sí que es necesario que se trabaje en el seno del equipo. Ante el Asvel no fue una excepción. Por suerte, los jugadores franceses no estuvieron prestos a aprovechar el regalo, algo que disimuló la bajada de tensión del Barça.

Puede que el dubitativo partido de Delaney ayudara a que en ciertos momentos la sensación de descontrol fuera evidente. El equipo deberá saber superar estas situaciones, ya que según que rival tengan enfrente el resultado puede ser nefasto. Por ejemplo, el próximo viernes en pista del Bayern, deberán estar muy atentos. Los alemanes han ganado 5 de sus 7 partidos en casa, entre ellos al Madrid, Milán y Olympiacos. Poca broma.