Este Barça sí que vibra

El Barça será el equipo local en la Final de la Supercopa

El Barça, a la espera rival, será el equipo local en la Final de la Supercopa

Bojan Krkic

Bojan Krkic

Hace unas semanas escribía en esta misma contraportada que el Barça necesitaba volver a vibrar. En ella decía que la clave estaba en que pudiera despojarse de la coraza de dudas e inseguridad que se había adueñado de la plantilla y, tras los partidos contra el Granada y la Real Sociedad, me alegra ver que el equipo empieza a despertar, a desperezarse de ese letargo.

Es cierto que se ganó en una tanda de penaltis, donde puede pasar de todo, pero más allá de la victoria ‘in extremis’, la sensación con la que yo me quedo es que la plantilla da muestras de algo bastante más importante como es el hecho de estar, por fin, estimulada. Los jugadores están empezando a hacer lo que se les lleva tanto tiempo pidiendo: renacer con el estilo que caracteriza a este club. Y parece que se está logrando. Es más, en estos dos partidos, estoy empezando a sentir que se ha dado el primer paso para hacerlo realidad. 

La prueba de ello es la forma en la que se ha vuelto a poner en práctica esa presión tras pérdida tan característica del FC Barcelona. Recuerdo que ésta era una de las cosas que más impresionaba y que más admiración despertaba del Barça de los grandes éxitos. Y es que no es que fuera difícil quitarles la pelota a esos jugadores -que lo era-, sino que una vez que se conseguía a los rivales no les duraba apenas nada en su poder ya que, en cuestión de segundos, los culés la recuperaban de nuevo. Quizás estemos todavía lejos de esa imagen, pero bien cierto es que percibo que eso ya se hace con mucha más naturalidad y también más intensidad. 

Además se ha recuperado el sistema 4-3-3 y jugadores como De Jong o Pedri están disfrutando gracias a que sienten la confianza del entrenador. En el caso del holandés, se está moviendo y encontrándose mucho mejor y en lo referente al canario porque, a pesar de ser un recién llegado, rinde a un altísimo nivel gracias a esa esperanza que Koeman deposita en él. Por eso no entro a valorar si se ganó o cómo se ganó el partido contra los vascos. 

Como ya he dicho hay cosas más relevantes que se pueden extraer de ese encuentro. Me quedo con otra más: la importancia de ganar sin Messi. Creo que es fundamental que el equipo sea capaz de sacar adelante este tipo de partidos también sin Leo. Es evidente todo lo que Messi puede aportar y qué duda cabe que hay que aprovechar cada encuentro, cada mes, cada día que podamos contar con él, pero no hay que olvidar que el argentino no va a estar eternamente y la plantilla tiene que aprender a crecer sin depender de que él solucione siempre todas las papeletas.

Y aunque me reitero en que el resultado no fue lo más reseñable del pasado miércoles, nadie duda de que es una gran satisfacción el hecho de que el Barça siga con opciones al título, ya que si fuera capaz de alzarse con la Supercopa, le daría a los jugadores la certeza de que están yendo en la dirección adecuada. Sin duda, sería un motivo de alegría en un año muy duro para el barcelonismo y un golpe de efecto para provocar el ansiado punto de inflexión. Al menos el camino parece que comienza a desbrozarse para que llegar al objetivo soñado sea una realidad cada vez más posible.