Barça: faltan los candidatos decisivos

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Joan Laporta ya estaría planificando su futuro equipo de trabajo / sport

Albert Sáez

Albert Sáez

Mientras la mitad de la plantilla se juega la vida por esos mundos de Dios sin que nadie sepa muy bien por qué, las elecciones a la junta del Barça van tomando forma. La gestora ha insinuado que la fecha podría ser el 24 de enero, pero no ha convocado. Con el calendario claro, ya se ha presentado oficialmente Xavi Vilajoana. Y en los próximos días lo harán dos nombres que pueden resultar decisivos, sin faltar al respeto de los que han dado el paso: Joan Laporta, que como explicaba ayer Joan Vehils ya tiene hasta responsable de comunicación (Lluís Carrasco), y Juan Rosell. La cosa, no nos engañemos, estaría entre ellos dos y Víctor Font.

A la espera de lo que haga Emili Rousaud. Pero el amplio elenco de precandidatos hace que haya dos asuntos decisivos en las próximas semanas: los avales y las alianzas. A excepción de Vilajoana, todos tienen que avalar y la cifra dependerá en buena medida de las cuentas que cierre la gestora. De manera que Tusquets tiene mucho que decir. Lograr las firmas con tanto precandidato y los avales con la crisis que tenemos encima no será fácil. Y visto como está el mundo del fútbol, será clave saber quién facilita el aval a unos y a otros. Visto, por ejemplo, lo que está pasando en el fútbol francés con Mediapro, según qué padrinos pueden ser tóxicos, para la campaña y para el mandato.

Con escasez de firmas y de liquidez, la segunda clave serán las alianzas preelectorales. Vilajoana, libre de aval, cotiza al alza, como también lo hacen gente con buenas bases de datos, como Benedito, Freixa o Farré. La pandemia lo hace todo más difícil y no aconsejan una junta elegida con menos de un 20 o un 30 por ciento de los votos. Habrá que tomar decisiones nada fáciles. Más, si fallan los derechos televisivos como ha pasado en Francia. Es el gran momento de los hacedores de pactos. Y aquí aparecen nombres clave entre bastidores, como Jaume Giró, bien conectado con Font, Laporta e incluso con Juan Rosell. O el de Alejandro Echevarría, buen amigo del mismo Juan Rosell y excuñado de Laporta con quien mantiene una buena relación. Esto acaba de empezar.