El Barça se enfrenta a su gran objetivo

Asignatura pendiente

El Alba de Berlín será, este viernes, el rival que empezará a marcar el futuro del Barça en la Euroliga. Una competición, la más importante de la temporada, que se le resiste a los blaugranas. La apuesta de la directiva del Barça, en forma de presupuesto y fichajes, obliga al equipo a ofrecer el único retorno posible que es ganar el título. El año pasado lo tuvieron a tocar, pero para todos los seguidores culés el objetivo prioritario sigue siendo coronarse como campeones. Para conseguirlo, Saras cuenta, en estos momentos, con una plantilla reforzada, experimentada y con todas las posiciones dobladas. Los “pesos pesados” del vestuario deben actuar de referentes para el resto de sus compañeros. No veo ningún rival que se pueda considerar superior al Barça. Ahora, los hombres de Jasikevicius ya saben cómo se las gasta la Euroliga y, por tanto, tienen recursos para hacer frente a cualquier adversidad. Además, empezar el torneo ganado y mandando en la clasificación, todo y no ser decisivo, ayudará a transmitir tranquilidad al equipo y también al entorno. El Barça ya hace demasiado tiempo que no se regala un éxito semejante. Una asignatura pendiente que debe tocar a su fin. No es cuestión de generar presión al equipo, pero cuando la oportunidad pasa por delante de ti, no la dejes escapar.

Los rivales más peligrosos

Como es habitual, todas las plantillas han hecho movimientos. No obstante, entre los “grandes” se ha mantenido un cierto conservadurismo y han podido retener a sus piezas clave. Por ejemplo, el Efes, vigente campeón, todo y perder a Sanli mantiene su exitoso bloque. Algo vital si entre tus filas cuentas con Larkin, Micic, Simon, Beaubois, Singleton o Dunston. El mayor peligro del Efes es que sus jugadores, aparte de su gran calidad, juegan de memoria tras años de mantener casi intacto el equipo. El CSKA también sigue siendo un candidato claro al título. La incorporación del enorme y desestabilizador Shved le otorga un plus de peligro que nadie podrá obviar. El conjunto ruso siempre acaba entrando en la Final Four, su regularidad es impresionante, y cada pocos años gana alguna Euroliga. Por su parte, el Madrid, pese a los recurrentes problemas físicos de sus hombres, conserva su áurea de conjunto que opta siempre al máximo. Algo parecido le sucede a un Fenerbahce, con Sasa Djordjevic en el banquillo, que con De Colo como referente máximo busca volver a reeditar antiguos éxitos. Veremos si el Milán de Messina, Sergio Rodríguez y Delaney es capaz de igualar la espectacular campaña que bordó el año pasado. Tiene jugadores para lograrlo, y un buen técnico en el banquillo. También Xavi Pascual y su Zenit tienen el reto de demostrar que su última serie de cuartos ante el Barça, estuvo a un paso de eliminar a los blaugranas, no es flor de un día. Ya se sabe que siempre pueden aparecer otros rivales que se hagan notar. Espero que sean muchos, ya que ello provocará que el nivel de la competición suba.