El Barça no deja respirar a la Penya

Calathes pugna por un balón

Calathes pugna por un balón / FC Barcelona

Nacho Solozabal

Nacho Solozabal

DOMINIO ABSOLUTO

La superioridad blaugrana fue total. Un Barça mucho más físico no permitió al Joventut entrar en el partido. Además, el equipo salió muy concentrado al duelo, sabedor que el primer partido en casa era vital. La defensa de los de Saras, intensa y sin fisuras, fue inabordable para una Penya que fue siempre a remolque en iniciativa y acierto. El primer cuarto fue de toma de contacto. Pero, a partir de aquí, una asfixiante defensa, el dominio absoluto del rebote, y una ambición desmesurada por doblegar al Joventut, hizo que el marcador fuera cada vez más favorable a los anfitriones. Me sorprendió que, ante el sinfín de canastas recibidas, los de Durán no fueran más severos detrás. Les costó entrar en bonus en los cuartos, y permitió al Barça que en su ataque posicional jugara casi a placer. No hubo ningún jugador verdinegro que destacara de forma constante. Y piezas importantes como Feliz, Ribas o el mismo Tomic no fueron los referentes esperados. El Barça, por su parte, aprovechó y bordó las ventajas en los cambios defensivos de los badaloneses para anotar cerca del aro. En esta faceta destacó un inconmensurable Smits, que se convirtió en una pesadilla sin tregua. Algo parecido se puede decir de un Hayes que hizo un trabajo oscuro pero imprescindible. Para acabarlo de redondear, entre el segundo y tercer cuartos el equipo despertó desde el 6,75, -Sanli, Abrines y Mirotic- y acabó por finiquitar el encuentro. La diferencia fue tan evidente que el último periodo sirvió para dar descaso a hombres importantes y minutos a los que menos juegan.

UNA VICTORIA COLECTIVA

Vimos al mejor Barça de los últimos meses. Tan sólo Kuric, muy apagado, se quedó sin anotar. Pero el rendimiento de un Sanli infalible, 4 de 4 triples, abrió el camino de la victoria que se plasmó en un carrusel de triples descomunal. El Barça hizo un 13 de 28 desde esta distancia de ocho jugadores diferentes. Pero hay más. De los 43 rebotes capturados, sólo tres jugadores blaugranas se quedaron inéditos. Estadísticas que reflejan que todo el equipo salió muy concienciado de lo que se jugaban, y que no bajaron el ritmo excepto en los minutos finales. También la diferencia en asistencias, 23-13, incide en un juego más colectivo del Barça, frente a un básquet más individual del Joventut. Los bases blaugranas, Jokubaitis y Calathes, superaron con claridad a sus pares, lo que permitió al Barça jugar siempre al ritmo que quiso. Higggins, pese a algunos errores, sigue sumando minutos y empieza a sentirse cómodo. Uno de los problemas de la Penya fue que no pudo correr ya que los blaugranas se empecinaron en cargar el rebote ofensivo, y además supieron gastar más faltas para evitar canastas fáciles. El Barça coloca el 1-0. Pero, es evidente que la Penya mejorará en el segundo partido, ya que ha visto con claridad cuáles han sido sus debilidades.

SANLI DESARBOLÓ A LA DEFENSA DEL JOVENTUT

Infalible. Sus continuaciones hacia fuera en los 2x2, todo y que la Penya era consciente, fueron letales. Pero además capturó 8 rebotes, líder del partido, y se fajó en defensa ante Tomic. Un partido sublime.

LA PENYA NO IGUALÓ EL FÍSICO DEL BARÇA

Me imagino que será uno de los aspectos en los que incidirá el técnico del Joventut. Casi se puede decir que el Barça los sacó del partido. Hicieron pocas faltas y permitieron a los blaugranas jugar con demasiada comodidad.