El Barça se abona al sufrimiento

Griezmann y Sergi Roberto marcaron

Griezmann y Sergi Roberto marcaron / sport

L. Miguelsanz

L. Miguelsanz

Los títulos, las Ligas también se ganan desde la agonía. Y, tal y como está este Barça, ya todo vale para sumar de tres en tres y llegar al clásico con las máximas posibilidades de darle la vuelta al campeonato. No hay duda que Setién no lo ha tenido nada fácil y, a parte de las lesiones, debe luchar con esa aura de desconfianza instalada en el entorno blaugrana. Hay poca fe en esta cortísima plantilla y cada encuentro es una auténtica batalla para sumar y ganar credibilidad. Complicado el momento, por lo que los tres puntos ante el Getafe tienen un mérito extraordinario.

Ante este mar de complicaciones, el Barça se enfrentaba al peor rival posible: llegaba un Getafe inmaculado al Camp Nou, el equipo con más fe y físico de todo el campeonato. Y Bordalás olió sangre entre tanto nerviosismo y a punto estuvo de llevarse el partido a su terreno. Los madrileños impusieron un ritmo frenético y repartieron todo lo que quisieron en el centro del campo ante la impunidad del colegiado. Pintaba mal, pero los blaugrana lograron bordar 15 de los mejores minutos de la era Setién para desarbolar al rival. Por fin funcionó la sociedad Messi-Griezmann y el equipo logró una actuación ofensiva coral estimable. Ese es el camino a seguir.

Pero este Barça camina sobre el alambre. Van ya muy justos de fuerzas y Jordi Alba se sumó a la lista de la enfermería. Cuando las piernas no funciona, la cabeza tampoco y tocó sufrir. Ángel, ese delantero deseado para suplir a Dembélé, marcó un golazo y llevó de cabeza a toda la zaga blaugrana. El drama se olía, pero el equipo mantuvo la compostura. Quizás demasiado poco, pero lo que toca ahora es sumar de tres en tres. Como sea. Llegarán tiempos mejores.