Somos el Barça

Gerard Piqué junto a Xavi Hernández en el partido ante el Benfica

Gerard Piqué junto a Xavi Hernández en el partido ante el Benfica / EFE

Alfredo Martínez

Alfredo Martínez

Durante las primeras decepciones de la temporada, se acuñó repetidamente la frase “ Esto es lo que hay”, para tratar de justificar los fracasos permanentes del equipo. Piqué fue de los primeros en abanderarla para luego rectificar y reconocer que en el Barcelona la exigencia es Máxima, y hay que ganar todos los partidos que se juegan. Koeman, azotado por las bajas, fue el máximo exponente de esa excusa para el equipo. Las lesiones le hicieron reiterar que a este Barcelona, no solo no se le podía exigir la Champions sino que, bastante sería con luchar por la liga.

Xavi no se anda con tapujos y dice abiertamente cuando le preguntan si el Barcelona puede ganar al Bayern en su estadio y contesta con la boca llena “SOMOS EL BARÇA”. Una frase muy simple, muy sencilla, pero que lo engloba todo. Un nivel de exigencia Máxima cada día y cada partido que te enfundas su sagrada túnica azulgrana. “Y podemos ganar a cualquier equipo”. Los rivales tienen que volver a sentir respeto y casi miedo cuando vean las remeras azulgranas enfrente. Xavi ha recuperado las esencias y lo que también es importante, el orgullo del equipo y del club. Del “Esto es lo que hay…”, a esta situación, media un abismo, el que ha rellenado Xavi insuflando ilusión a la afición.

Porque sí, la gente se vuelve a sentir orgullosa de su equipo, vuelve a vibrar con ellos, vuelve a creer en ellos. La conexión del equipo con la grada en la tarde-noche de perros en la Ciudad el día del Benfica así lo corrobora. Y lo ha hecho con trabajo. Mucho trabajo. Con personalidad, mucha personalidad y con barcelonismo a raudales. Con sentimiento de club. Xavi ha revolucionado la Ciudad deportiva en apenas las dos semanas largas que lleva trabajando. Vuelve locos a los empleados, apretando, cambiando, innovando, detallando. Obsesionado como Guardiola por la perfección de todos los detalles.

En el área deportiva del club, cuando ven los entrenamientos sonríen satisfechos y sorprendidos por la modernidad y profesionalidad del grupo que ha traído Xavi. Nada se deja a la improvisación. Cuando salen a entrenar los jugadores ya tienen una serie de cuadrantes y consignas para aprovechar al máximo el tiempo de trabajo que les espera durante el césped. Dicen que las comparaciones son odiosas…así que dejémoslo estar. Puede que nos dejemos llevar por la euforia del momento o que nos estemos agarrando al único clavo ardiendo al que poder asirse pero el aire fresco que desprende y que genera Xavi desde la banda y en cada mensaje que lanzan invitan a los aficionados a volver a sacar pecho de ser barcelonistas. Dicen que nunca es tarde si la dicha es buena así que, Xavi, ¡ Qué bueno que viniste!.

Porque que nadie lo olvide “SOMOS EL BARÇA” .