El Balón de Hojalata

Modric, levantando el Balón de Oro

Modric, levantando el Balón de Oro / EFE

Joan Mª Batlle

Joan Mª Batlle

Ya lo ven, Modric Balón de Oro. Un Balón de Oro que lleva cinco meses desaparecido, en una alarmante baja forma de la que no es ajena la crisis del Madrid. Que sí, que ganó la Champions y fue finalista del Mundial, pero un Balón de Oro de medio año es medio Balón de Oro. Insisto, desde agosto nada se sabe de él, mientras un tal Leo Messi siempre está ahí, de enero a diciembre, con algún borrón como el de Roma, vale, se lo concedo a sus detractatores, pero no en un bache de cinco o seis meses. ¿Eso de qué va? ¿Ganar la Liga, la Copa y ser el máximo goleador europeo no da más que para ser quinto? Que Messi sea el quinto clasificado es un insulto al fútbol, a sus valores y a los aficionados. No, esto no es el Balón de Oro, esto es el Balón de Hojalata, un premio totalmente desprestigiado desde el momento en que da la espalda a la realidad y que para mayor bochorno incluso borra una encuesta popular de internet al constatar que Leo era el ganador de los aficionados. 

LAS AUSENCIAS. Aquí hay muchos intereses creados, más política que fútbol, y cuando eso ocurre, los aficionados no se creen nada. Es tanta la vergüenza que este Premio encierra, que ya ni siquiera interés genera. En la gala del lunes no estuvieron presentes ni Messi ni Cristiano Ronaldo entiendo que por razones distintas. Vaya por delante que lo cortés no quita la valiente y que Messi hubiera quedado como un señor presentándose en París y dejando todavía más en evidencia a Cristiano Ronaldo. Pero los motivos de ambos, a juzgar por las reacciones, no son las mismas. El entorno, familiar y profesional, del portugués no ha podido ser más mal educado y barriobajero con Modric, que fue su compañero hasta hace cinco seis meses. Ha quedado claro que lo de Cristiano es un ataque de cuernos. Por contra, Messi simplemente ha pasado. No dio cobertura al premio porque ha perdido todo interés para él. Ante la injusticia, ignorancia. El Balón de Hojalata no le interesa. Cuando vuelva a ser de oro, que le avisen.