MI VERDAD

El Atlético puede darle un disgusto al Madrid

Josep Maria Casanovas

EL ATLÉTICO SUBE AL CIELO. 40 años después, el Atlético de Madrid llega otra vez a la final de la Copa de Europa. Tiene un mérito extraordinario la proeza del equipo de Simeone. Se ha cargado con justicia y merecimiento al millonario Chelsea. El Cholo ha dejado KO a Mourinho. Los rojiblancos han dado una lección de coraje, amor propio y ambición. Se han comido a los ingleses en una segunda parte impresionante tras remontar un marcador que se les puso adverso con el gol de Fernando Torres. Pero este Atlético tiene una fuerza especial, transmite el coraje y genio de su entrenador, se crece en los momentos culminantes sacando fuerzas increíbles después de una temporada fantástica. Partido a partido y ya están en la final de Lisboa y a dos victorias de ganar la Liga. Y todo esto con un presupuesto de solo 146 millones, muy inferior a los 500 del Barça y Madrid. El fútbol ha sido justo y ha dejado en la cuneta al especulador Chelsea para colocar en la gloria a un Atlético que está superando los mejores sueños. No nos cansaremos de repetirlo, el artífice de todo esto es el Cholo, un técnico que está sacando el 150% al equipo a base de motivación, trabajo, esfuerzo y sacrificio. Eliminaron al Barça y se han cargado a los ingleses. La cara de cabreo de Mourinho reflejaba la rabia interna que sentía ante la impotencia de su equipo, que vive del pasado y practica un juego rudimentario.

DUELO FRATRICIDA. El 24 de mayo en Lisboa tendremos final española. Por primera vez en la historia de la Champions se enfrentarán dos equipos de una misma ciudad. El Madrid el martes barrió al Bayern de Guardiola y anoche el Atlético sacó lo mejor de sí mismo para conseguir una victoria histórica e inapelable. El partidazo que hicieron los rojiblancos demuestra que la ilusión es el mejor doping de los futbolistas. Inexpugnables en defensa con un Courtois que hundió a su propio equipo por mucho que le duela a Mou. El Chelsea está como el Barça, necesita una renovación a fondo, algo más que chapa y pintura. Han llegado a la semifinal con más pena que gloria. El Atlético se ha convertido en un equipo grande y todavía no ha dicho su última palabra. No se lo pondrá fácil al Madrid y puede darle un disgusto. Será un duelo fratricida. Un Madrid que ya se ve campeón con la Décima en el bolsillo frente a un Atlético que se dejará la piel con un juego donde la fuerza y la agresividad están de su lado.