Año de luces y sombras

Frenkie de Jong

Frenkie de Jong / VALENTÍ ENRICH

Gerard López

Gerard López

Año de contrastes el vivido en el FC Barcelona. Acaba un 2019 en el que ha habido cosas buenas como ganar la Liga, de la que ya nadie se acuerda, que amplía el dominio blaugrana (8 ligas de las últimas 11) y que acentúa la sensación de superioridad con los rivales directos. Fue un campeonato liguero tranquilo en cuanto a diferencia de puntos, y esto hay que ponerlo en valor.

Parece que ganar esta competición sea un éxito habitual cuando no lo es por ser el torneo que marca tu día a día. Es el mejor título de la temporada en España, que acabó con un inicio de renovación de la plantilla con la incorporación de jugadores que deben marcar una época como son De Jong o Griezmann.

El centrocampista holandés está llamado a marcar una etapa en el Barça. Es titular indiscutible desde el primer momento pero todavía se le espera mucho más.

El francés, por su parte, ya ha demostrado sintonía con los otros dos integrantes del tridente y los registros goleadores ya son nornales, según lo visto en las últimas temporadas. 

También hay jugadores cuya constancia ha sido clave como es el caso de Piqué, Busquets, Suárez o Alba, jugadores que podrías estar pensando en un relevo generacional pero, de momento, tienes la sensación de que no dejan de ser imprescindibles para el equipo. El rendimiento de Gerard, Sergio, Luis o de Jordi sigue siendo decisivo para el equipo. El día que no estén, los echaremos de menos

Otro aspecto que hay que valorar es el Balón de Oro de Leo Messi quien, año tras año, sigue siendo referencia del equipo. No es fácil ser escogido el Número 1 y lograrlo una vez más, por sexta vez, es una demostración de la facilidad con la que logra liderar un equipo.

En definitiva, del 2019 nos queda la Liga, la conquista del Balón de Oro y la incorporación de jugadores claves para un futuro.

La otra cara de la moneda

Recordamos la elimiantoria de Champions contra el Liverpool como un traumatismo similar al vivido la pasada temporada en Roma, en el 2018. Son dos lecciones que deben servir para esta temporada cuando, en febrero, abril o marzo, vengan las eliminatorias europeas. No sé si lahabremos aprendido de los riesgos que entraá dicha competición.

La Champions League no regala nada, exige al máximo y no te permite una desconexión. No da tregua porque te puedes cruzar con equipos más fuertes físicamente como el Liverpool o el PSG actual o el Ajax de la pasada temporada. 

El convulso final de la Liga de Campeones te lllevó al depresivo final de temporada con la final de la Copa del Rey o la ausencia de Luis Suárez, unas sensaciones diferentes a las previstas cuando olías a un triplete histórico.

La media revolucion con la cambio generacional de De Jong y Griezmann no se completó, Alba no tiene suplente, De Ligt no lo tienes como opción a Piqué y los jóvenes canteranos no acabar de dar el paso en el centro del campo, algo que sí ha ocurrido en la delantera con Ansu Fati o Carles Pérez. Aleñá está a punto de salir del club, Wagué no tiene continuidad y Riqui Puig se queda en un segundo plano. La tercera unidad que es la canterano no acaba de tener el protagonismo deseado. El Barça está en pleno proceso de cambio porque cuenta con muchos jugadores por encima de la treintena a los que son difíciles de suplantar.

-El Espanyol necesita una reacción

El Espanyol se ha cargado a Machín y ya es el segundo entrenador del equipo en solo 18 partidos. El equipo va de mal en peor y necesita una reacción. Nop creo que sean necesarios 44 puntos para salvarse sino que estaríamos por encima de los 35. Y esto quiere decir que al Espanyol le quedan 25. Que no es poco.

-Odegaard, MVP de la primera vuelta

Odegaard es el mejor jugador de la primera vuelta de la liga española. Su rendimiento ha sido espectucular, llevando a un equipo que no luchaba por nada a cuotas más elevadas. Odegaard lidera a un equipo renovado y el noruego ha demostrado para mucho más. Es un fururo crack de la competición.

-Hidalgo cambia la cara del Sabadell

De la mano de Antonio Hidalgo, entrenador del Sabadell, el equipo arlequinado está al frente de la clasificación de Segunda B, un puesto de mérito que constrasta con el rendimiento del conjunto ofrecido en la pasada temporada, que estuvo al borde del descenso. Hidalgo ha cambiado la cara a un histórico de la categoría.