Agárrense, que vienen curvas

El Barça reacciona demasiado tarde y se queda sin Copa (ES)

El Barça reacciona demasiado tarde y se queda sin Copa

Joan Mª Batlle

Joan Mª Batlle

Valverde afrontó la final con el equipo más jugón posible. Con Coutinho Arthur, a los que los médicos habían dado el alta apenas unas horas antes del comienzo del partido. Arturo Vidal, en el banquillo; Sergi Roberto de tercer delantero, o de cuarto centrocampista, según cómo se mire, o según por dónde discurriera la pelota, da igual. El caso es que el entrenador barcelonista apostó por la esencia más pura posible del modelo que tantas veces le han acusado de traicionar.

La pregunta es si hizo lo que creía o lo que creía el entorno. Eso nunca lo sabremos, si no nos lo explica el entrenador, que no lo explicará. Pero la realidad fue la que fue. El Barça tenía el balón, pero cada vez que el Valencia lo robaba, en tres pases se plantaba ante Cillessen. Tres ocasiones y dos goles y medio, el medio lo salvó Piqué bajo los palos en una primer aviso que cayó en saco roto. Pero los dos que entraron, pesaron como una losa. El fantasma de Liverpool se cernía sobre Sevilla. 

LA HORA DE LAS DECISIONESValverde deshizo la alineación en el descanso. Arturo Vidal por Arthur..., lo que en teoría debería ser al revés, y Malcom por Semedo para abrir el campo. Cuarenta y cinco minutos perdidos. Salió mejor el Barça. Messi estrelló un balón en el poste y luego recortó distancias. Pero no fue suficiente. La Copa se fue a Valencia. Y ahora se plantea un escenario complicado.

¿Valverde? Pues miren, está ratificado por Bartomeu y por Messi. Más ratificado, imposible. ¿Los jugadores? Pues miren, Coutinho se hizo el harakiri; Rakitic Busquets, casi; Arthur sale movido en la foto; también habrá que preguntarse porqué Suárez se operó tras lo de Liverpool y no esperó a mañana... Hay que tomar decisiones. Lo que hace veinte días era un triplete ha acabado en un título, sí, la Liga, pero ahora sí que sabe a poco. La decepción es tremenda. La presión sobre Valverde será insoportable. Bartomeu también lo tendrá difícil. Agárrense, que vienen curvas.