¡Adiós, Coutinho! ¡Hola, Lewandowski!

Philippe Coutinho celebra un gol con el Barça tapándose los oídos

Philippe Coutinho celebra un gol con el Barça tapándose los oídos / Jordi Cotrina

Lluís Mascaró

Lluís Mascaró

Vender a Coutinho por 20 millones es un gran negocio. Y más si te ahorras la ficha de 23 millones de la próxima temporada. El mal negocio fue ficharlo por 160 millones (120 fijos más 40 de variables), una cifra récord en la historia del Barça. La trayectoria de Coutinho en el Camp Nou es la crónica de un fracaso previsible. Traerlo para que fuera el ‘nuevo Iniesta’ fue un despropósito que se ha pagado muy caro. El brasileño jamás se adaptó al juego del equipo. Y acabó deambulando como un alma en pena por el césped del estadio. Fue, seguramente, un blanco fácil para los socios y aficionados cabreados, que llegaron a pitarle en varias ocasiones. Pero es que su rendimiento jamás estuvo a la altura de las expectativas que generó su llegada en el mercado de invierno del 2018.

Cuatro años después, la salida por la puerta de atrás del futbolista es la triste culminación de la desastrosa gestión deportiva y económica perpetrada por Bartomeu y sus ejecutivos con los 222 millones de euros ingresados con la cláusula de rescisión de Neymar. Ni Coutinho (25 goles en 106 partidos y una temporada y media cedido al Bayern y al Aston Villa), ni Griezmann (35 goles en 102 partidos y una temporada cedido al Atlético), ni Dembélé (32 goles en 148 encuentros y 13 lesiones) han justificado los más de 400 millones de euros despilfarrados. Coutinho ya ha fichado por el Aston Villa, Griezmann seguirá en el Atlético y Dembélé posiblemente abandonará el club a final de temporada si no acepta una renovación a la baja. Es la trilogía de un desastre.

LEWANDOWSKI, MÁS CERCA

El fichaje del polaco se calienta. El Barça ya tiene un acuerdo total con el futbolista, que está presionando al Bayern para que le deje salir a un precio razonable (unos 35-40 millones de euros). El club bávaro ha aceptado que el goleador no seguirá y hasta Nagelsmann ya le ha abierto la puerta. Todo encaja para que en las próximas semanas Lewandowski sea la nueva estrella del Barça. La negociación entre clubs no será fácil, pero la rotunda voluntad del polaco de jugar en el Camp Nou será decisiva.

Fichar a Lewandowski sí que es fichar sobre seguro. El delantero lleva siete años marcando más de 40 goles por temporada (su media es de 45,4) y su rendimiento, a pesar de estar a punto de cumplir 34 años, está absolutamente asegurado, al menos un par de campañas más. A falta de Haaland (inasumible desde el punto de visto económico) bueno es Lewandowski. Bueno no, muy bueno…