El 5-1 no debe confundir al Barça

Muchos aficionados del Barça cogen como referencia el 5-1 del partido de la Liga Santander en el Camp Nou, cuando no debería ser así, pues incluso en esa ocasión el Barça pasó por problemas con el 2-1. Además, es clara la mejoría  en los blancos en los últimos partidos, aunque es cierto que no ha tenido ninguno de esos partidos que se dicen grandes. Al menos, en el aspecto anímico, su confianza es mayor. Cabe recordar que, pese a la victoria apabullante, en la ultima década los barcelonistas han estado más acertados en los clásicos en Madrid que en el Camp Nou, donde han obtenido peores resultados.

Me apunto a los que opinan que hay más en juego para los madridistas, pues la Copa del Rey se presenta como la competición más factible de conseguir y, en el caso de superar al Barça, serán los favoritos al título.

Atención al desgaste que conlleva disputar tres clásicos en tan poco tiempo, ya que puede pasar factura a uno y otro equipo. El esfuerzo físico y mental en cada uno de sus enfrentamientos puede dejar tocado a alguno de los equipos,  teniendo en cuenta que se puede decidir gran parte de la temporada. Además, al estar tan pegados los 1/8 de final de la Champions ante el Lyon y el Ajax, respectivamente, si alguno sale muy tocado de los clásicos puede caer en esa ronda europea.

DUDAS EN EL MADRID

Con todos disponibles, se le presentan varias dudas a Solari, sobre todo en ataque. El buen rendimiento de Vinicius y la presión de los medios de comunicación y de los aficionados blancos a favor del brasileño obligan, con casi total seguridad, a que sea uno de los titulares en ataque. Benzema, que atraviesa su mejor momento en el Real Madrid, es el más fijo de todos, y la plaza restante se la disputarían Bale y Lucas Vázquez. Lucas parece el protegido de Solari, que apostó por él descaradamente e incluso ante el Alavés le dio descanso pensando en la Copa.

No veo una tripleta formada por Bale, Benzema y Vinicius, pues ninguno de los tres exhibe la capacidad de trabajo en defensa para ayudar al centro del campo. Dejar al Barça en clara superioridad en la zona fuerte del equipo de Valverde, no debería ser conveniente para los blancos. Sí puede hacer esa labor de cuarto centrocampista. Otro caso lo tenemos en el lateral zurdo, donde Reguilón le ha ganado la posición a Marcelo: defiende mejor y no ataca mal. En cambio, Marcelo tiene a su favor ser genial en ataque y la jerarquía y peso en el vestuario. 

ZONA DETERMINANTE DE JUEGO

Para el Barça es esa zona de tres cuartos de campo, entre la línea defensiva y los centrocampistas, donde irrumpe Messi y que tantos dolores de cabeza ha generado a los técnicos blancos, hasta el punto de recordar que Mourinho apostó por colocar de medio centro a Ramos. Ahora, el encargado de estar sobre Messi será Casemiro, intentando parar el juego e impedir que Messi pueda realizar sus conducciones o disparos a portería. Lo mismo sucede en la otra parte del campo, donde Benzema se retrasa para recibir y acudir a esa zona para combinar y realizar paredes con Vinicius o con quien tenga cerca. Es el máximo peligro de los blancos y en esa zona, bien Busquets o bien Rakitic, deben estar pendientes de los movimientos del francés.

PROTAGONISMO DE BENZEMA

Ha pasado de ser discutido y silbado por la afición en el Bernabéu a ser el auténtico faro del equipo y no simplemente por su aumento en la eficacia ante el gol, sino por la aportación a la creación del juego ofensivo. Se muestra más que antes, bajando a recibir incluso en zonas de mediocampistas para crear, combinar y con cambios de ritmo asistir o finalizar las acciones, con mucho mas acierto a la hora de definir en las porterías rivales. Ha sido el gran beneficiado de la marcha de Cristiano Ronaldo.

Él es ahora el protagonista, cuando todo apuntaba a que ese rol debería recaer en la persona de Gareth Bale, pero ha sido el francés el que se ha responsabilizado de convertirse en el líder ofensivo del equipo.

FACTOR VINICIUS

Ha pasado de jugar en cuentagotas a ser prácticamente titular indiscutible. Solari le ha dado continuidad viendo la poca aportación de Bale o el bajón de Asensio. Esos 18 años hacen que afronte cada uno de los partidos con la frescura y la inocencia del joven, que carece de experiencias negativas en su mente y, por lo tanto, se convierte en el típico jugador descarado a la hora de probar cosas sobre el campo. Tiene buen cambio de ritmo y parte de la banda izquierda intentando las diagonales en conducción al estilo de cómo lo hacia Neymar para buscar paredes o finalizar.

RECUPERACIÓN DE EFECTIVOS

No en número, pero sí en estado de forma. Los Modric, Kroos, Casemiro o Varane del inicio de temporada estaban a años luz de su mejor momento, y ahora han mejorado tanto física como anímicamente. Todavía restan algunos como Marcelo, Asensio o Bale, que no se han encontrado a si mismos , pero es cierto que la mayor competencia con las apuestas y su rendimiento en los Marcos Llorente o Reguilon, han podido ser  un arma para despertar a algunos jugadores que se veían demasiado titulares.

MARCELO, AL BANQUILLO

La aparición de Reguilon  en el lateral zurdo, que por lo menos parece haberle ganado la partida a Marcelo, ha dotado al equipo de mas solidez defensiva, al tiempo que ofensivamente también tiene criterio para incorporarse. Veremos si eso supone un acicate para el brasileño, que sin duda siempre ha tenido lagunas en defensa, pero en ataque ha sido determinante en muchos partidos. Tengo mis dudas de si en un partido de final, Solari  apostaría por el canterano, dejando fuera a Marcelo. Pero hasta la fecha el rendimiento de Reguilon es mas que aceptable.

APUESTA FIJA POR LUCAS VÁZQUEZ

La titularidad fija de Lucas Vázquez, aunque sin la frescura y la chispa que demostró cuando se ganaba el puesto en pasadas campañas, ha contribuido a darle un poco mas de consistencia al equipo. Su trabajo de extremo en ataque, pero de centrocampista en defensa y sus ayudas al lateral derecho, hacen que el equipo sea mas bloque y no se encuentre en inferioridad numérica en el centro del campo.

CONTROL SOBRE LOS PARTIDOS

Le ha costado al Real Madrid pero parece por fin haberlo conseguido. Apenas controlaba el juego y los partidos, el equipo se rompía por la mitad con mucha facilidad y los rivales le llegaban en cada partido y se encontraban con manos a manos con el portero. Ahora parece estar cómodo llevando la iniciativa del juego y mandando y encerrando a sus rivales. Ya no es el contraataque su arma mas habitual, ya elaboran mas las jugadas con muchos mas toques, y llegando igualmente con bandas con sus laterales y hombres de fuera, para realizar muchos centros al área. Manda en el campo, cuando antes no parecía hacerlo.