La ruta gastronómica de más altitud en Grandvalira

Las estaciones de Grandvalira Resorts han desarrollado una oferta gastronómica muy completa que permite disfrutar con la familia o grupo de amigos en la pista y recobrar fuerzas en las terrazas y restaurantes distribuidos por los distintos sectores de la estación.

Con más de 60 puntos de restauración entre Grandvalira y Ordino Arcalís, la variedad gastronómica es realmente amplia y se renueva año tras año incorporando nuevas especialidades, chefs de renombre y actividades, como música en directo, convirtiéndose así en una parada obligatoria para todos los visitantes, que pueden crearse una propia ruta gastronómica.

Cocina tradicional de altísima calidad

Se puede empezar el día con un buen desayuno healthy en el nuevo establecimiento My Corner ubicado en la terraza exterior de la Piolet Brasserie, en el sector Grau Roig, que aumenta así su oferta gastronómica ya desde primera hora y se suma a la tradicional carta y parte de brasería que ya ofrecía el restaurante Piolet. Aunque hay motivos para volver a visitar el restaurante este año, pues con la nueva colaboración con el prestigioso chef Josep Maria Kao, la carta ha incorporado los mejores sabores de China a la estación. El toque dulce, tanto en la Piolet Brasserie como en todos los restaurantes a la carta de la estación, lo pone Christian Escribà con sus postres inspirados en el mundo de la nieve.

También en el sector Grau Roig y a 2.307 metros de altitud, se puede optar por el Refugi del Llac de Pessons que es, sin lugar a duda, uno de los lugares más singulares de Grandvalira. Con vistas al precioso lago helado de Pessons, este restaurante con más de 30 años de experiencia está especializado en cocina pirenaica tradicional de montaña y ofrece comidas en un ambiente rústico y romántico.

Los amantes del buen arroz querrán apear los esquís por un rato y visitar la Arrosseria Pi de Migdia, en El Tarter. Con una arquitectura singular, un interior cálido y una terraza muy acogedora, la Arrosseria es el entorno ideal para disfrutar de una cocina de producto de alta calidad y de una extensa carta de extraordinarios arroces, mariscos, pescado fresco y carnes al horno de carbón.

Siguiendo la ruta, otra parada obligada es la terraza del Cala Bassa Costa Rodona, en el sector Pas de la Casa de Grandvalira. El CBbC es uno de los snow lounges más exclusivos de la península, un espacio exterior que invita a relajarse en un ambiente chic que nos transporta a su homónimo en Ibiza. Ofrece la misma cocina mediterránea que se elabora en el CBbC Restaurant de Ibiza, pero introduce algunas novedades más adecuadas al clima pirenaico. Y, como no podía ser de otra forma, en su terraza se puede disfrutar de la música de DJ’s en directo que consiguen crear un ambiente único en Andorra.

Los más sibaritas no pueden perderse el Wine & Meat Bar by Jean Leon, un renovado restaurante bistronómico con producto de gama alta, pero con un servicio desenfadado. Distintas zonas harán de esta visita una divertida experiencia degustación. La Josper área ofrece las mejores carnes cocidas a la brasa, la parte del Colmado tiene las tapas con productos Premium, y el Wine Bar – como parte fundamental de la experiencia – una amplia propuesta de vinos del Penedés de la casa Jean para acompañar la selección de platos elegida.

Volviendo a la cocina tradicional, pero esta vez en la estación de Ordino Arcalís, encontramos el Refugi de les Portelles. Es el restaurante más alto de Andorra, a 2.500m, y también el más pequeño, lo que le hace especialmente acogedor con su cuidada decoración. Este año ha introducido un cambio en la presentación de los platos, aunque mantiene el espíritu de montaña con un tipo de ‘cocina de la abuela’ con combinaciones elaboradas y el toque andorrano a sus platos de mediodía.

El renovado L’Abarset, el broche de oro

Aunque ofrece servicio todo el día, L’Abarset es una magnífica opción para cerrar la jornada de esquí disfrutando del mejor après-ski de Europa. Es un restaurante bistronómico que ha abierto estas navidades con un renovado local y un nuevo concepto que une música, ocio y gastronomía con música en directo, DJs y cenas temáticas. Su arquitectura es una clara apuesta por la socialización y la diversión, con una iluminación totalmente integrada y natural y una atmósfera muy acogedora que creará los momentos aprés-ski más especiales.

Y para los que aún tengan ganas de más, los restaurantes de Grandvalira pueden abrir por la noche para grupos, ofreciendo cartas exclusivas, con opciones también para vegetarianos. La increíble ubicación de estos restaurantes en las montañas de Grandvalira, hace que los comensales deban coger una ratrac para llegar, y podrán volver esquiando si quieren. Sin duda una gran opción para redondear las jornadas en Grandvalira Resorts.